El presidente Jair Bolsonaro dice no sentirse presionado para lanzar la vacunación masiva en Brasil, que es el segundo país con mayor número de muertos por causa de covid-19.
Hoy, el país más grande de América Latina contabiliza un total de 190.795 casos letales. Es la segunda nación del mundo por número de fallecidos después de Estados Unidos.
En paralelo, todos los gobiernos del mundo se preparan y arremeten con logísticas cuidadosas para el transporte, la distribución y aplicación de cualquiera de las vacunas que lleguen a sus regiones.
Pero mientras tanto, Bolsonaro sostiene que “no se puede aplicar cualquier cosa en la gente”.
Este sábado fue consultado sobre si se siente presionado por el hecho de que otros países ya hayan puesto en marcha sus programas de inmunización. “Nadie me presiona para nada, me importa un carajo”, respondió, según reprodujo RT.