El pueblo de Santa Isabel vivió este jueves un día histórico: el concejo deliberante aprobó, en una sesión especial y por mayoría de 4 votos contra 2, la destitución de la intendenta Marta Paturlanne (Frejupa, peronismo): la acusaron de cometer irregularidades y de pagos no justificados. La jefa comunal no se presentó a la audiencia, pero envió una nota de descargo por las 25 presuntas irregularidades señaladas por una comisión investigadora. Dijo que no cometió delitos y aseguró que, por eso, no podían echarla. Sin embargo, en una maniobra que se venía cocinando desde el año pasado y con un final cantado, la desplazaron con 4 votos de concejales del peronismo y del macrismo y 2 en contra del peronismo. En su lugar, tomó el sillón municipal Guillermo Farana. “A Paturlanne le faltó autocrítica. Le faltó escuchar las voces”, dijo segundos después de jurar sobre una Biblia. Afuera del recinto, bajo la lluvia, hubo aplausos de un grupo de pobladores.
La acusación fue impulsada por Farana. Precisamente uno de sus compañeros de boleta en las elecciones de 2019. “No me importa ser intendente. Yo solo quiere que todo sea transparente”, había dicho días antes Farana, al responder a los señalamientos por su embestida contra la jefe comunal.
Paturlanne -militante de la marinista línea Convergencia y sin experiencia en la gestión política- recibió un pueblo sumido en un grave desmanejo, luego de años de gobierno del vernista José Luis Rodríguez.
En ese marco, y bajo la pandemia, tomó una serie de medidas que enojaron a Farana, a sus exsocios políticos y a los opositores.
Ya a mediados de 2020, la relación se tensó y el vice decidió avanzar contra Paturlanne. Incluso, a fines del año pasado, logró suspenderla y ocupar el sillón durante un mes.
La sesión especial de este jueves comenzó minutos a las 19.20 horas, con una fuerte presencia policial.
En un primer momento, los concejales leyeron la acusación de la comisión investigadora. Se trató de una acusación realizada por Bernardo Ocejo, con 25 puntos en los que señaló presuntas irregularidades.
Entre otras acusaciones, Paturlanne -quien el año ya había sido suspendida por los concejales, aunque luego logró ser repuesta en el cargo por la Justicia- fue imputada de aumentarse su salario y el de sus funcionarios en diciembre de 2019 sin autorización del cuerpo deliberativo (posteriormente decidió donar su salario); de no presentar a tiempo los balances mensuales y rendiciones de cuentas (NdeR: posteriormente hubo balances que se presentaron; incluso este jueves 25 intentó presentar más balances, pero llamativamente el concejo no los aceptó); de no presentar a tiempo los presupuestos; de no responder pedidos de informes; de bonificaciones de tasas a sus allegados; de contratar a empleados en forma irregular; y hasta de pagar unos 80 mil pesos a un vecino por alquileres adeudados del lugar donde se estableció la sede partidaria del PJ, unidad básica de campaña, ajenos al municipio.
Además, la acusaron de una “omisión de presentar declaración jurada de sus bienes”; de no realizar inventarios de los bienes municipales; de hacer transferencias irregulares de dinero a abogados; de no dar “información a la comisión investigadora”; y de efectuar “transferencias sin concursos de precios”.
Luego se leyó la nota entregada por la jefa comunal. Dijo, al cuestionar la acusación, que el procedimiento de hoy “no está fijado por ley”, que se “ha violado el principio de debido proceso” y que en el concejo se han “atropellado los derechos políticos”.
La jefa comunal sostuvo que no cometió delito. “Reconozco haber realizado algunos actos por desconocimiento, pero nunca con la voluntad de cometer una ilegalidad”, sostuvo.
Paturlanne expresó que por “falta de experiencia y desconocimiento en la materia” se presentaron con demoras las rendiciones de cuentas. “Siempre hubo voluntad de presentar las rendiciones. Nunca hubo voluntad de ocultar nada”, expresó.
Los concejales entraron, a las 19.50 horas, a un cuarto intermedio. Retomaron la sesión a las 20.35 horas, con la aprobación de la destitución.
Por la destitución votaron los peronistas Guillermo Farana y Cristian Echegaray y los macristas Bibiana García y Bernardo Ocejo.
En contra del desplazamiento lo hicieron los peronistas Fabricio Domínguez y María Elizabeth Cabral.
Farana y los otros tres concejales dijeron, al votar, que en la investigación e imputación se respetó la Ley Orgánica de Municipalidades y Comisiones de Fomento de La Pampa. También, sostuvieron, “se ha respetado el derecho de defensa y la independencia y objetividad” de los concejales que la investigaron y se “ha acreditado la totalidad de las irregularidades” investigadas.
A su vez, dijeron que “resultó irrelevante el descargo” realizado hoy por Paturlanne.
Incluso resaltaron que la intendenta “ha provocado un perjuicio económico a la intendencia” y ha “impedido el control” de los actos de gobierno.
Farana juró a las 22 horas, sobre una Biblia. Luego dio un breve discurso. “No todos sabemos todo. A veces nos equivocamos”, dijo, en referencia a la jefa comunal desplazada. “No todos tenemos que saber la Ley Orgánica de Municipalidades o la Ley de Contabilidad. Y no culpemos a la gente que recibió los pagos irregulares, porque la que cometió los errores administrativos fue Paturlanne. Ellos también fueron víctimas”, dijo.
“Gastó un millón de pesos en asesores contables y legales y ninguno le permitió hacer un procedimiento correcto para justificar los pagos”, expresó.
“Mañana estaremos en la municipalidad. El pueblo es de todos y la municipalidad es de todos”, sostuvo.
También le dedicó un párrafo al Gobierno de Sergio Ziliotto. “Le agradezco que no haya intervenido (la intendencia). Ha permitido que funcionaran las instituciones. No se llevó por cosas que le llegaban de otros sectores”, sostuvo.