Marcos Grandón, propietario de la carnicería Pampa Meat, de Santa Rosa, opinó que el cierre de exportaciones no es la solución para bajar los precios porque esa medida va a provocar desabastecimiento y encarecerá la carne. Pidió “diálogo” para encontrar un acuerdo. Reveló que el consumo cayó “entre 30 y 40 por ciento”.
Grandón habló con Radio Textual (LU 33) y opinó sobre el conflicto de la carne. “Es un período inflacionario donde todo arrastra hacia la góndola. La nafta aumenta, vivimos pagando impuestos y hoy los productores están cansados. El que tiene poco lo cuida y lo hace valer. Los que más sufren son los que empiezan y terminan la cadena”, analizó.
“Hoy los aumentos de listas de precios es por la suba del gasoil y los fletes”, explicó y consideró que “no sirve el cierre de exportaciones porque eso hará que haya desabastecimiento, no se va a conseguir hacienda y van a subir los precios. Me parece que es tiempo de diálogo para buscar un acuerdo”, reclamó.
-¿Cuánto más aguantan las carnicerías con este cese de comercialización?
-Tenemos stock para aguantar cinco o seis días. Si no hay faena y no ingresa hacienda, va a quedar poco para vender.
-¿Cómo está el consumo?
-Ha caído un 30 o 40 por ciento. Hay días como los lunes, martes y miércoles que directamente no conviene abrir. La gente tiene poca plata y se cuida.