La Cámara de Diputados dio media sanción al proyecto de biocombustibles, en una maratónica sesión que comenzó pasadas las 14. La norma recibió 135 votos a favor, 110 en contra y dos abstenciones y fue girada al Senado para su sanción definitiva.
El proyecto de ley, impulsado por el Frente de Todos, sumó para su aprobación en Diputados los respaldos de una veintena de legisladores de otras bancadas, entre los que se destacaron ocho de Juntos por el Cambio, pertenecientes a provincias azucareras.
Finalmente, los tres integrantes de PJ pampeano -que había adelantado su voto en contra- dieron luz verde. En tanto, los dos de Juntos por el Cambio lo hicieron en contra.
¿Qué le dieron a La Pampa para que los legisladores peronistas, que no estaban de acuerdo al corte, ahora dieron el OK? Lograron meter un artículo que reconoce el mayor costo logístico de las plantas de La Pampa. «El hecho de reconocer el mayor costo logístico de las plantas producto de localización desfavorable respecto de los puertos de exportación es enaltecer el espíritu federal que esta iniciativa persigue», dijo Ariel Rauschenberger.
De acuerdo al texto votado, se establece un nuevo marco regulatorio del régimen de biocombustibles hasta el año 2030 y se fija en 5% el corte obligatorio de biodiésel para el gasoil -actualmente está en 10%- y en 12% el corte con bioetanol en naftas -se mantiene el mismo porcentaje-.
El proyecto había tenido dictamen de comisiones en mayo pasado, pero recién se votó este jueves, a 11 días de que caduque la prórroga por dos meses de la Ley 26.093, que el Poder Ejecutivo determinó por decreto.
Los defensores de la iniciativa aseguraron que la nueva ley beneficiará a las PyMEs y ayudará a controlar el precio de los combustibles. Por el contrario, quienes se opusieron pronosticaron la pérdida de puestos de trabajo y cierre de empresas, criticaron las facultades que tendrá la autoridad de aplicación y alertaron por un retroceso en materia ambiental.
La iniciativa busca crear un Marco Regulatorio de Biocombustibles, el cual comprende todas las actividades de “elaboración, almacenaje, comercialización y mezcla de biocombustibles”, industria que esta presente en 10 provincias argentinas a lo largo de 54 plantas productoras.
El nuevo régimen tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030. Según el texto, “todo combustible líquido clasificado como gasoil o diésel oil que se comercialice dentro del territorio nacional, deberá contener un porcentaje mínimo obligatorio de biodiésel de 5%, en volumen, medido sobre la cantidad total del producto final”. De esta manera, se reduce en un 5% el corte con biodiésel, que actualmente está en 10%.
El argumento del oficialismo cuando se critica la reducción del porcentaje es que en la actual ley figura un 5%, pero al 10% se llegó a través de diferentes resoluciones del Ejecutivo desde 2006 en adelante.
Además, en la iniciativa se estima que la Secretaría de Energía podrá elevar o reducir el porcentaje -hasta un 3%- cuando así lo considere, de acuerdo a distintas condiciones del mercado.
En el caso de las naftas, deberán “contener un porcentaje mínimo obligatorio de bioetanol de 12% en volumen, medido sobre la cantidad total del producto final”. En este caso, el porcentaje se mantiene igual que hasta ahora.
El oficialismo consiguió 135 votos a partir de los 115 propios y de los respaldos del Frente de la Concordia Misionero (3), el Justicialismo (2); Unidad para el Desarrollo (2), Acción Federal (2); Juntos Somos Rio Negro (1), el Movimiento Popular Neuquino (1) y el monobloque Justicia Social, de la tucumana Beatriz Avila, quien hasta 2019 fue aliada de Cambiemos.
Los diputados de Juntos por el Cambio que le dieron el visto bueno al proyecto fueron los jujeños Gabriela Burgos (UCR), Jorge Rizzoti (UCR) y Osmar Monaldi (PRO); los tucumanos José Cano (UCR), Lidia Ascárate (UCR) y Domingo Amaya (PRO) y los sanjuaninos Eduardo Cáceres (PRO) y Marcelo Orrego (aliado PRO).
Esos legisladores acompañaron el proyecto por los beneficios que el nuevo régimen otorga a las provincias azucareras, según explicaron en sus discursos y en declaraciones periodísticas.
Además, los republicanos Héctor Stefani (Tierra del Fuego) y Julio Sahad (La Rioja) fueron las dos únicas abstenciones registradas en la votación.
Los 110 votos en contra, en tanto, correspondieron a Juntos por el Cambio (99); Córdoba Federal (4); Consenso Federal (3); la Izquierda (2); el Socialismo (1) y el Frente Progresista (1).
Al momento de la votación se registraban ocho ausentes: 3 del PRO; 2 de la UCR; 1 de la Coalición Cívica y 2 del Frente de Todos.