El fiscal Oscar Cazenave acusó este sábado, en una audiencia de formalización, a Yanina C. (31 años) por el delito de tentativa de homicidio contra su pareja, el policía Gabriel P. A. (37 años): según se sospecha, habría sido ella la que coloco un poderoso insecticida, llamado Metomil, en un licuado de banana que le preparó para su esposo.
La audiencia -que se desarrolló pasadas las 13 horas, vía Zoom- fue presidida por la jueza María Florencia Maza. El fiscal Oscar Cazenave informó de qué se la investiga, en tanto que la mujer fue defendida por Rodrigo Villa.
La mujer no declaró, pudo saber Diario Textual. El fiscal pidió 30 días de prisión preventiva, mientras se desarrolla la investigación. En tanto, el defensor solicitó que quedara en libertad porque -a su criterio- no existe ni el peligro de fuga ni de entorpecimiento de la investigación. Subsidiariamente, en caso del rechazo a su requerimiento, solicitó el arresto domiciliario.
Finalmente la jueza decidió la prisión preventiva, por 30 días, sustituida por un arresto domiciliario. Ordenó que le coloquen una pulsera electrónica para controlarla.
El policía, por su parte, permanece internado en grave estado de salud en el Hospital Molas. Hace seis días que se encuentra en coma, luego de que el domingo a la noche, cuando se encontraba en la sede de la División Seguridad Rural, ingirió un poco del líquido que contenía una botella de vidrio. Incluso un perro que lamió el líquido murió casi inmediatamente.
El fiscal la acusó del delito de tentativa de homicidio, agravado por el vínculo y el uso de un producto venenoso.
La mujer fue detenida en la tarde del viernes, en la casa de la avenida XIII de Caballería, de Toay. Es una vivienda que comparte junto al policía y el hijo de ambos.
Hay un par de pericias claves en toda la investigación, pudo confirmar Diario Textual. Primero, en un audio de una llamada, la mujer le indica al policía que pase a retirar el batido de banana que le había preparado. Es decir, admite que ella preparó el batido.
En segundo lugar, los peritos encontraron restos de Metimol en la licuadora y en los jugos gástricos de perro y en la orina del policía. También los policías hallaron un sobre con el veneno.
Ahora una de las dudas es determinar si el veneno fue colocado, adrede, por la mujer o si se equivocó.
Todavía, incluso, no está determinado el móvil del caso. Extraoficialmente ha trascendido que la mujer podría haber sido víctima de violencia de género y que no había tenido posibilidades o no había sido respaldada para hacer la denuncia.