El Comité de Derechos Humanos de la ONU concluyó hoy, en un dictamen que calificó de «histórico», que Paraguay violó los derechos de una comunidad indígena a sus tierras tradicionales y a tener su «domicilio», por la falta de prevención de contaminación tóxica de sus tierras causada por el uso intensivo de plaguicidas.
Se trata del primer dictamen del Comité, que afirmó que, en el caso de pueblos indígenas, la noción de «domicilio» debe entenderse como «la relación especial que mantienen con sus territorios, incluyendo sus animales de cría, cultivos, y su forma de vida relacionada con la caza, recolección y pesca».
El dictamen responde a una denuncia presentada por el líder comunitario electo y por un maestro de la escuela comunitaria, en nombre de los 201 integrantes de la comunidad indígena Campo Agua’ẽ, del Pueblo Ava Guaraní.
La comunidad indígena de Campo Agua’ẽ, que reside en el departamento suroccidental de Canindeyú, vive en una zona rodeada de grandes empresas agrícolas que fumigan para producir soja genéticamente modificada.
«Esa fumigación ha matado los animales de cría de la comunidad indígena y afectado sus cultivos de subsistencia y árboles frutales, así como recursos de la caza, pesca y recolección», indica el Comité en el dictamen, informó la agencia de noticias AFP.
Tras varios procesos administrativos y judiciales largos y sin resultados en el país, la comunidad llevó su caso ante el Comité de Derechos Humanos, que considera que «Paraguay no monitoreó adecuadamente la fumigación y no pudo prevenir la contaminación».
«Dicha omisión en su deber de proteger permitió que prosiguieran por muchos años las fumigaciones masivas y contrarias a la normativa interna, destruyendo elementos constitutivos de la vida privada, familiar y domicilio de la comunidad indígena afectada», aseguró el dictamen.
El Comité «recomienda que Paraguay prosiga con los procesos penales y administrativos en contra de los responsables, repare integralmente a las víctimas por el daño sufrido, tome todas las medidas que sean necesarias, en estrecha consulta con la comunidad, para reparar la degradación ambiental, y adopte medidas para evitar que se cometan transgresiones semejantes en el futuro», dijo el organismo.