Molesto con la decisión presidencial de laudar a favor de La Pampa y que se haga un estudio integral de impacto ambiental de la represa Portezuelo del Viento, el exgobernador y actual diputado nacional, Julio Cobos (UCR), manifestó que el gobierno mendocino debería analizar su retiro del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco).
En diálogo con el diario San Rafael, Cobos dijo: “Creo que habrá que considerar lo que dijo Omar De Marchi (diputado nacional – PRO), que es salir del Coirco, porque esta comisión interprovincial que se creó para el manejo del agua no tiene por qué impedir que nosotros podamos regular nuestros ríos ya que vivimos en un desierto, y necesitamos embalsar el agua para protegerla y utilizarla cuando la necesitemos”.
El Comité Interjurisdiccional del Río Colorado está integrado por las 5 provincias que comparten la cuenca del río Colorado y son: Mendoza, La Pampa, Neuquén, Río Negro y Buenos Aires. Este comité administra las áreas de riego y distribuye el caudal de agua entre ellas. Todas las obras que se realicen y tengan un impacto en la cuenca deben consensuarse en este ámbito.
“La Pampa tiene otra realidad, ellos forman en gran parte de su territorio, La Pampa húmeda. Repito que mi posición es que, si esto del nuevo impacto ambiental sale ya como decisión firme, nosotros debemos hacer lo que dijo De Marchi, y salir del Coirco”, añadió quien fuera también vicepresidente de la Nación.
Julio Cobos fue quien durante su gobierno acordó con el expresidente Néstor Kirchner la realización de la obra. Con relación a las expresiones del presidente Alberto Fernández y la necesidad de hacer un estudio ambiental, dijo: “Las declaraciones no han caído bien en la gente, en el arco político, en el propio gobernador Suárez, y en mi persona. La verdad es que el tema vuelve a plantearlo el gobierno de La Pampa, porque los estudios están realizados, pero ellos no lo aprobaron y tuvo que laudar en su oportunidad el presidente (Mauricio) Macri”.
“Alberto Fernández tiene que considerar que una obra de esta naturaleza para generar energía no tiene un mal uso del agua, porque ésta pasa por las turbinas y vuelve al río. Durante la construcción de la represa, que demorará aproximadamente cinco años, el impacto para La Pampa será cero. Cuando comience a llenarse la represa, lo que hay que tener es un muy buen manejo de los caudales mínimos para no afectar a las provincias que componen el Coirco, y esto ha sido considerado en el estudio de impacto ambiental. El impacto lo tendremos en Mendoza porque se inundarán caminos, puestos, etc. Entonces, si el Presidente dice que durante la obra él garantiza el buen manejo de los caudales, y cualquier duda que surja será esclarecida durante el desarrollo de ésta, le resta argumentos a lo que diga La Pampa, y permite al gobernador (Rodolfo) Suarez que adjudique la obra y los mendocinos tendremos una obra necesaria. Si no se hace Portezuelo, seguiremos teniendo riesgos en caso de que hagamos otras”.
“¿Quién nos asegura que los pampeanos no seguirán oponiéndose a cualquier obra que proyectemos? Los mendocinos estaremos condenados a no hacer ninguna obra hidroeléctrica porque todo confluye, siempre, en el tema del escurrimiento de agua interprovincial”, concluyó Julio Cobos.