Los concejales del Frepam le reclamaron al intendente Luciano di Nápoli una solución a la problemática de los perros callejeros que en los últimos días han atacado a varias personas en Santa Rosa, provocándole serias heridas. El radical Pablo Pera le pidió al jefe comunal “acciones concretas” para controlar la “sobrepoblación que desde hace largos años aqueja a nuestra ciudad”.
El tema resurgió en los últimos días luego de dos ataques de perros callejeros en Sana Rosa, uno a una nena de 2 años, que sufrió mordeduras en la cara; el otro a una mujer de 74 años que había salido a caminar por la avenida Spinetto y fue atacada por tres canes.
“Estamos pagando muy caro la inactividad del Estado municipal que, bajo pretexto de la pandemia, suspendió el servicio de zoonosis, incluso cuando desde el minuto 0 de cuarentena se excluyó de la misma a la actividad veterinaria por saberse imprescindible y de muy necesario mantenimiento. Dos años de inactividad provocaron el nacimiento descontrolado de perros y gatos sin tener un hogar donde acomodarse, haciendo que las luchas territoriales y para procurarse el escaso alimento, sean moneda corriente”, dijo Pera.
“Mientras que en otros lugares se le ha dado lugar al perro sin estirpe ni hogar, entrenándolos en la búsqueda de sus habilidades, en nuestra ciudad se pone debajo de la alfombra su existencia, destinando sus vidas a un grupo de personas que se dedican al proteccionismo que ni quieren ni pueden, ocupar el lugar del Estado”, sostuvo.
“Desde nuestro bloque estamos procurando, aún infructuosamente, que se trate en comisión el proyecto que hace poco más de dos años dejó la Fundación Vidanimal. Qué mejor que una organización que lleva sobre sus espaldas ni más ni menos que quince mil castraciones, para que aporte su experiencia. Tenemos la firme convicción que la mejor manera de solucionar un problema es evitando que se produzca, con idéntico razonamiento, de implementarse campañas eficientes de castraciones tempranas, sistemáticas, gratuitas y abarcativas en poco tiempo se verán los resultados positivos”, reclamó.
“Nuestra función pública -agregó el concejal Pera- depende de la voluntad política de todos los sectores partidarios. Desde nuestro lugar estamos apostando al diálogo dando por punto de partida el hecho que la situación ha escalado hasta niveles perjudiciales para nuestra comunidad. Tomamos conocimientos de mordidas, la precipitación de accidentes por caninos en la calle y tristemente la producción de lesiones que entrañan un sentimiento de mucho resentimiento. Ello por no hacer aquello que el municipio debe hacer, sumado a la negativa de apoyar y trabajar en conjunto con las ONG que en nuestra ciudad llevan muchos años y una vasta experiencia en la materia como son APANI y Vidanimal”.