Se reunió la Comisión de Peticiones para tratar pliegos enviados por el Poder Ejecutivo, que fueron dictaminados favorablemente por mayoría, fijando posición en el recinto por minoría.
En primer lugar, se puso a consideración el proyecto que propone designar en el cargo de titular en la Defensoría en lo Penal de la Cuarta Circunscripción Judicial, a María Soledad Trímboli.
En la ronda de preguntas, el diputado Francisco Torroba consultó por su experiencia en Santa Isabel y en la región. “Es una zona -respondió la letrada- que se caracteriza por la vulnerabilidad económica y social. Hay cuestiones de violencia que están arraigadas. El tema de la lejanía complica mucho las cosas, y genera que todos los conflictos se profundicen”.
También advirtió sobre la necesidad de tener un contacto “cara a cara” con las personas. “Hay gente que no sabe leer ni escribir. Entonces si uno no está cara a cara con la persona, es muy difícil darse cuenta de lo que ocurre. Necesitamos una oficina de Defensoría en Santa Isabel o en Algarrobo del Águila. También las unidades funcionales son muy necesarias”, dijo.
Ante la consulta sobre los delitos más habituales en la zona, Trímboli respondió que “la gran mayoría” tiene que ver con la violencia doméstica. “Después hurtos menores o lesiones en riñas. Es muy común en las fiestas entre pueblos que se desconozcan. También el robo de ganado es un tema”, dijo.
Más adelante Sandra Fonseca pidió la opinión de la abogada sobre el registro de abusadores sexuales, ya que cuando finalizan su pena “no se sabe qué ocurre con estas personas y se insertan a la sociedad sin ningún seguimiento” de las autoridades. “Ciertamente que exista un registro es muy estigmatizante, aunque estadísticamente siempre vuelven a reincidir, por eso es un tema que merece un debate profundo. En muchas ocasiones en los abusos sexuales hay un juicio abreviado y una condena condicional, y esto las víctimas lo pueden percibir como una forma de impunidad. No tengo una opinión formada, pero sí merece un debate profundo”, respondió.