La brasería Listo El Pollo está de festejo. Este fin de semana, esta tradicional casa de comidas de Santa Rosa cumplió 30 años.
Gustavo Ferraris (58) y Fernando Gorondi (53) son amigos y dueños del emprendimiento que da trabajo a 12 familias.
El 2 de julio de 1992 abrieron el local en la calle Sarmiento. Y desde hace unos 14 años las parrillas están ubicadas en la avenida Spinetto 26, a metros de las vías del ferrocarril.
Es una referencia ineludible de la gastronomía de la capital pampeana, por sabor y calidad. Todos los días -a excepción de los domingo a la noche y lunes, que está cerrado- decenas de clientes eligen el clásico pollo y otras comidas que, con los años, se han agregado al menú: asados, milanesas, pasteles de papas, guisos de lentejas, postres y bebidas.
Gustavo es de Río Cuarto y, desde la adolescencia, está instalado en Santa Rosa, en tanto que Fernando es oriundo de Luan Toro. “Nos hicimos amigos y, en una charla de café, cuando estábamos desocupados y en una época muy difícil, poner la brasería”, cuentan. “Pedimos algo de dinero prestado a familiares y amigos y arrancamos en la calle Sarmiento. Esa noche del 2 de julio de 1992 vendimos 17 pollos. El primer pollo fue de regalo…”, recuerdan.
“Nos fuimos haciendo cada vez más conocidos y le empezamos a anexar más comidas. También pusimos por primera vez en Santa Rosa y la zona la venta telefónica y el delivery”, sostienen.
¿Cuál es el secreto para mantenerse tantos años? “Trabajo, constancia, calidad en los productos y prolijidad en los números”, dicen. “Acá, en principio, hay mucha constancia. En los primeros años tratamos de abrir todos los días, incluso los domingos a la noche. Luego ya adoptamos el descanso de domingo y lunes. También es muy importante la prolijidad en los números y la organización. Entre los dos socios nos complementamos: uno es el de los números y el otro el que le gusta estar en el mostrador para vender y tener todo impecable”, explican.
Tienen 12 empleados, algunos de ellos que ingresaron a través del programa Primer Empleo (con el que el Gobierno, en los primeros meses, paga una parte del salario). “Nuestra cocina lleva mucho trabajo y dedicación y eso hace que sus sabores estén llenos de tradición. Por todo esto queremos dar las gracias a nuestros empleados por su dedicación y su actitud de entero compromiso para nuestra empresa”, agregan.
Tienen clientes que los eligen desde el 1992. “Solo tenemos palabras de agradecimiento a nuestros clientes por la confianza otorgada. También a todos nuestros proveedores por ser grandes compañeros en este camino”, sostienen. “Somos unos privilegiados en cumplir 30 años mirando al futuro”, finalizan en medio de las parrillas y las brasas.
