Walter Brandimarte, referente pampeano de la Corriente Clasista Combativa (CCC), dijo este sábado que es “tentador para los compañeros y las compañeras” la puesta en marcha desde este sábado 1 del programa Puente al Trabajo Pampeano que busca, con una fuerte ayuda estatal, que empresas privadas tomen personal que tienen planes sociales y los incorporen al empleo formal. “Las ganas de pasar a un trabajo genuino es enorme”, expresó en Radio Textual (LU 33).
En La Pampa son 3500 los planes sociales en condiciones de acceder al trabajo formal a través del programa Puente al Trabajo Pampeano, que se complementa con el programa nacional Puente al Empleo. Según contó Brandimarte, las autoridades provinciales dieron una cifra de los posibles nuevos empleos. “Nos dijeron, en la reunión donde se hizo anuncio, que la expectativa de la Provincia es que pasen 1500 planes al empleo formal”, contó.
De todas maneras, dijo que desde la CCC tienen “dudas” de si se podrá llegar a esa cifra, a raíz de la disponibilidad de las empresas privadas. “Es un programa tentador para los compañeros y las compañeras. Después, habrá que ver desde el sector privado qué capacidad tiene…”, agregó.
Este programa entró en vigencia hoy. Prevé que, por cada titular de un plan social nacional que acceda a un trabajo formal a través del plan nacional Puente al Empleo, un empleador recibirá la suma aproximada de $72.000, según el estatuto laboral del sector, durante 12 meses consecutivos. Esa suma se compone del 50% del Salario Mínimo, Vital y Móvil, que aportará el Gobierno provincial, más un aporte igual del Gobierno nacional, a lo que se suma el monto de las contribuciones patronales.
Cada trabajador o trabajadora accederá a un empleo registrado con los haberes que determine cada convenio colectivo, a los que se sumarán las asignaciones familiares y bonificaciones pertinentes. Es decir, el Estado nacional y el provincial pagan parte de los salarios y de las cargas sociales.
“Entre los compañeros hay una buena expectativa”, insistió Brandimarte. “Porque nosotros siempre dijimos que el plan era un tránsito o una emergencia, y que el objetivo es el trabajo formal”, aclaró.
Dio otro dato: en el país hay 1400.000 de planes sociales. De esos, 370 mil están en manos de organizaciones sociales, como la CCC.
De todas maneras, dijo que el trabajo formal se puede vehiculizar a través de cooperativas. “Nosotros tenemos varias cooperativas, que se lograron con el impulso de los compañeros que buscaban un trabajo. Estas cooperativas no son incompatibles con estos programas que se lanzan ahora… Están incluidas las cooperativas. Por eso muchos compañeros siguen con su objetivo de tener un trabajo genuino dentro de las cooperativas”, avisó.
La CCC tiene, entre otras, cooperativas de obras, de carpintería, de limpieza, de cuidados y acompañantes terapéuticos, de pinturería domiciliaria y de obras, de desmalezado, de parquización y de fábricas de premoldeados.
También resaltó que, en la reunión donde se anunció el programa, hubo dirigentes comerciales de General Pico con mensajes “estigmatizantes” a los que tienen planes. “Un dirigente que dijo que son vagos, que no van a cumplir horarios, que no saben trabajar… Es algo muy doloroso escuchar esto en una reunión donde tratamos de coordinar para que la gran masa de desocupados que tiene La Pampa pueda insertarse”, sostuvo.
Brandimarte, en otro tramo de la entrevista, sostuvo que desde la CCC ya percibían un incremento de la pobreza y la indigencia en la provincia. “Por ejemplo, veíamos un crecimiento de las demandas de viandas en los lugares donde comedores. En Santa Rosa tenemos cuatro comedores y tres merenderos. Y también constantemente están llegando a nuestra organización para obtener los planes”, expresó.
El miércoles, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) informó que en el conglomerado Santa Rosa – Toay hay más pobreza que en el promedio nacional: 35,9%. Y la indigencia alcanza al 13,2%.