Los intendentes y las intendentas del peronismo -justo en medio de la promesa de “mayor horizontalidad” de los popes del PJ– ya lo blanquean sin disimulo: se sienten que no han sido protagonistas de las principales decisiones políticas y electorales de los últimos años y pretenden tener otro papel. Por lo pronto, pudo confirmar Diario Textual, ya se reunieron la semana pasada en Lonquimay y ahora ya organizan un segundo encuentro para el lunes 5 a la tarde en Catriló.
En Lonquimay, con Manuel Feito de anfitrión, se reunieron 12 jefes comunales. En Catriló, con Ricardo Delfino, se espera superar ese número.
Se trata de encuentros informales de jefes comunales en actividad -algunos que han ganado, otros que han perdido-. “Queremos empezar a reunirnos para hablar, dialogar y reflexionar, con el fin de fortalecer al peronismo”, dijo un jefe comunal a Diario Textual, que accedió a hablar bajo la condición de anonimato
“Queremos tener otro protagonismo en el peronismo. Hemos sido dejados de lado de las principales decisiones”, sostuvo otro.
La intención es que las reuniones sean periódicas y se roten en los pueblos. “Es un espacio de trabajo, tanto de los que ganamos como de los que perdimos”, dijo, a su vez, otro intendente. “Somos los intendentes y las intendentas los que, en definitiva, juntamos los votos”, finalizó.
Se cuidan en decirlo, pero deslizan que no tienen apetencias electorales. De todas maneras, no se puede obviar que entre los participantes al encuentro de Catriló estará el intendente de Telén, Saúl Echeveste, quien tiene intenciones de ser precandidato a diputado nacional. No es un secreto que ya hay jefes comunales -incluso lo insinúan algunos del vernismo- que le vienen dando un aval a su postulación.
Tampoco hay que desechar la posibilidad de que, eventualmente, haya intendentes que propongan o sugieran el nombre de un “tapado” para los comicios que se avecinan. Ya circulan nombres.
Estos encuentros habían sido reclamados, principalmente, por intendentas luego de las elecciones legislativas nacionales de 2021, donde el peronismo perdió. Sin embargo no habían pasado de encuentros entre las mujeres a cargo de las municipalidades. Los intendentes varones, pese a las advertencias, habían dejado que las principales decisiones y estrategias salieran desde Santa Rosa o General Pico. Los resultados del 14 de mayo los hicieron recular.
Además, algunos de los jefes comunales tienen intenciones de empezar a tallar más fuerte en el Gobierno provincial: principalmente en la Secretaría de Asuntos Municipales, clave en la relación con las municipalidades.
Se producen en momentos de una definición clave. El lunes se conoció que Carlos Verna adelantó que la Plural no pondrá precandidato a diputado nacional. Y el martes el gobernador Sergio Ziliotto dijo que se viene un periodo de “mayor horizontalidad” en el peronismo pampeano.
“Creo que comienza una etapa de mayor horizontalidad en el PJ de la provincia de La Pampa. Muchas veces se ha planteado que el peronismo necesitaba un adelanto doctrinario, una actualización doctrinaria, y bueno, creo que hoy, leyendo cuáles son las necesidades de la gente, la evolución del mundo y la evolución de los distintos partidos políticos, hoy aggiornarse a la demanda de la sociedad es darle mayor horizontalidad a nuestros dirigentes”, expresó.
En las última horas, desde General Pico volvieron a marcar la cancha. Carlos Verna dijo que sigue “activo”, reiteró que en 2021 el peronismo perdió porque todos los precandidatos vivían en Santa Rosa y expresó, incluso, que el 14 de mayo el gobernador Sergio Ziliotto fue reelegido principalmente gracias a los votos de General Pico.
