Las autoridades de Francia han elevado a más de 150 el número de detenidos en el marco de las protestas, una cifra muy inferior a las de las noches anteriores, después de cuatro jornadas marcadas por las protestas en las calles francesas tras la muerte a manos de la Policía de un joven de 17 años en Nanterre.
El Ministerio del Interior de Francia ha señalado que al menos 157 personas han sido detenidas y ha apuntado que tres policías y gendarmes han resultado heridos en el marco de los incidentes, que han incluido 352 incendios en vía pública y la destrucción de cerca de 300 vehículos, según ha informado la cadena de televisión francesa BFM TV.
Este balance, que incluye una veintena de detenciones en París, se ubica lejos de los más de 700 arrestados del sábado y los más de 1.000 el viernes, después de que varios sectores políticos y sociales hayan hecho numerosos llamamientos a la calma.
Por otro lado, la Policía ha tenido que dispersar con gases lacrimógenos a unos cientos de personas de un grupo de extrema derecha que protestaba en las escaleras de un hotel en Lyon, según informa el diario Le Figaro.