Las empresas elaboradoras de combustibles, entre ellas RefiPampa, la refinería socia del Gobierno de La Pampa, salieron a denunciar que las petroleras no están entregando los volúmenes de crudo que necesitan para poder mantener los niveles de producción destinados a atender la demanda interna de combustibles.
La reaparición de los envíos con cupos de naftas y gasoil que están recibiendo las estaciones de servicio luego del congelamiento de precios que acordaron el Gobierno y las petroleras tras la devaluación post PASO, se ha sumado en los últimos días una nueva complicación que afecta el mercado de los combustibles y que, de no resolverse rápidamente, podría agravar los crecientes problemas de abastecimiento que se registran en la mayoría de las provincias.
Raizen, titular de la marca Shell, Pan American Energy (PAE) -dueña de Axión Energy- y RefiPampa, con planta en 25 de Mayo y cuya producción es comercializada por medio de la firma Voy Con Energía, advirtieron a las autoridades de Energía que no han podido cerrar con las productoras los contratos de suministros que les permitan tener garantizadas las entregas de petróleo que requieren para poder sostener sus plantas operativas en setiembre y octubre.
Puntualmente, plantearon por escrito que tienen los siguientes faltantes de crudo para setiembre y octubre: Raizen: 55.000 metros cúbicos (m3); PAE: 114.000 m3 y RefiPampa: 85.500 m3.
Ante el área energética que conduce Flavia Royón, las refinerías destacaron que algunas petroleras no aceptan vender al precio que está acordado para el mercado interno y otras, directamente, sostienen que no cuentan con suficiente producción para proveer los volúmenes solicitados, según publicó IProfesional.
Qué dicen las petroleras
Luego del incremento del 18% promedio que aplicaron en el transcurso de agosto, las petroleras y el Gobierno consensuaron mantener congelados los nuevos precios de los combustibles hasta fines de octubre. Ese acuerdo incluyó desgravaciones fiscales para abaratar la importación de combustibles y un valor interno estabilizado de u$s56 el barril, para atemperar el impacto de la devaluación del 22% del 14 de agosto en los costos de producción de las refinadoras y en los surtidores.
De entrada, los especialistas del sector advirtieron que ese precio doméstico -una nueva especie de “barril criollo temporario”- había quedado muy distanciado de la paridad de importación que promediaba los u$s80 por barril. Esa diferencia se fue agrandado con el correr de los días a medida que subió el precio del crudo en el mercado internacional hasta alcanzar valores promedio en torno de los u$s90 el barril.
Ante esa situación, las petroleras habrían comenzado a privilegiar las ventas de crudo local a los mercados externos, colocando mayores volúmenes de exportación en detrimento de la provisión interna.
El reclamo de RefiPampa
En el caso de RefiPampa -la empresa que preside César Castillo-, en una nota remitida a Energía y al ministro de Economía, Sergio Massa, remarcó la falta de crudo. “Se informa que desde el mes en curso no se encuentra garantizado el total del volumen de petróleo crudo requerido para nuestra operatoria. Ello atento a que nuestros proveedores no están dispuestos a comercializarlo al precio oportunamente convenido (Oilstone Energía, Magdalena Energy y Petróleos Sudamericanos) o bien informan no tener la cantidad requerida por razones de producción (Petrolera El Trébol, Petroquímica Rivadavia, Pampa Energía, Vista Energy, Equinor y Capex)”, comunicó.
Refipampa tiene su refinería en 25 de Mayo. Pampetrol, la empresa petrolera controlada por el Gobierno provincial, es socia en esa refinería.
En lo que respecta a PAE, los técnicos de Energía tomaron con pinzas su denuncia de faltante de crudo y recordaron que, ante un pedido efectuado en junio, la empresa envió una nota firmada por Daniel Ciaffone (Integrated Supply & Trading VP) donde precisó que su refinería de Campana “se encontrará abastecida del petróleo crudo necesario para el funcionamiento durante el transcurso del corriente año calendario”.
En los últimos días, Royón y el subsecretario de Hidrocarburos, Federico Bernal mantuvieron dos reuniones con las empresas productoras y las refinadoras para tratar de encontrar una solución que permita normalizar las entregas domésticas de crudo.
Sin haber llegado a un acuerdo, las partes quedaron en volver a encontrarse antes del próximo viernes para ver si se puede llegar a un entendimiento que revierta la situación. En caso contrario, la que tendrá que intervenir es la propia Secretaría de Energía dando de baja los permisos de exportación que sean necesarios para poder garantizar el suministro interno.
Las estaciones de servicio, en jaque
Por el lado de las estaciones de servicio, los expendedores no descartan de poner en marcha un cierre nocturno masivo de todos los surtidores si no aparecen las medidas de alivio fiscal y financiero que prometió el secretario de Comercio, Matías Tombolini.
Agrupados mayoritariamente en la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA), los dueños de las estaciones resaltaron que enfrentan una situación límite debido al congelamiento de los precios de las naftas y el gasoil, la inflación sin freno y la doble caída en los ingresos y la rentabilidad del negocio.
Precisaron, además, que sigue sin resolverse el reclamo de aumento de las comisiones por cada litro vendido que vienen planteando para poder mejorar sus ingresos y hacer frente a los mayores costos operativos y salariales.
Con respecto a los cupos de entregas que aplican las petroleras, desde CECHA advirtieron que ya afectan a un número creciente de estaciones de Neuquén, Río Negro, Misiones, Corrientes, Chaco, Formosa, Salta. Santa Fe, Córdoba, La Pampa y parte de la provincia de Buenos Aires.