Las estafas telefónicas mediante la modalidad del “cuento del tío” están a la orden del día. Sus principales víctimas son los adultos mayores. No dar información personal y cortar la comunicación son algunas de las estrategias que recomienda la Policía para evitar ser estafado.
Matías Arias, subjefe de la Brigada a de Investigaciones de la Unidad Regional II y uno de los encargados de brindar charlas y capacitaciones sobre el tema habló en Radio Textual (LU 33) y dio consejos para no ser engañado.
“Cuando alguien llama y los hacen ir al cajero, ya sea por una compraventa o contratación de bienes o servicios online, y les dicen que por no pueden transferirles el monto de la compra, no deben brindar claves porque allí ingresan a sus cuentas y se las vacían”, explicó Arias.
Para evitar este tipo de maniobras, la Policía monitorea las cámaras y cuando se observa a una persona en un cajero con un teléfono en el oído durante mucho tiempo eso se torna sospechoso y el policía avisa a la comisaría de la zona. “Muchas veces se ha evitado que las estafas se concreten porque llegó un policía a tiempo y alertó a la persona que iba a ser estafada”, reveló Arias.
Otro dato a tener en cuenta: “Todo aquel que diga ‘no corte la comunicación’ o ‘estoy afónico por una gripe que tengo’, hay que cortar. Algo que funciona es decirle ‘corto y te llamo yo’, entonces automáticamente el estafador interrumpe la llamada”, explicó el policía.
También aconsejó cortar la llamada cuando del otro lado el desconocido le dice que tiene secuestrado a un familiar. “Enseguida se debe cortar y llamar al familiar aludido”.
Tampoco se debe continuar la charla cuando aducen que hay que cambiar los dólares o que hay que entregar el dinero para no caer en el corralito.
Se debe tener en cuenta que los delincuentes ahora cambian de característica el llamado por un código de área local.
“Ya se han adaptado a las características y normalmente llaman con características de la zona. No siempre la estafa va a entrar con un 011, de Buenos Aires, o característica de otra provincia. Han logrado adaptarse a eso también”, dijo Arias.
Además de no dar claves, ni datos personales, tampoco hay que dar nombres. “Muchos dicen ‘me mandó la tía’, entonces no tenemos que dar el nombre de nadie porque los estafadores se nutren de información que no tienen y la logran cuando la persona a la que llaman no está atenta”, aconsejó.