Horas después de la dura derrota sufrida por la Selección argentina ante Uruguay en la cancha de Boca, el club emitió un comunicado en el que informó que la Bombonera había sido clausurada por haber superado la capacidad de aforo establecida en al previa del duelo por las Eliminatorias Sudamericanas.
“Orgullosos de haber recibido en casa a los campeones del mundo en un clima festivo y con total normalidad, el Club Atlético Boca Juniors comunica que, a pesar de no haber superado la capacidad máxima del estadio, la agencia gubernamental de control del GCBA decidió, finalizado el encuentro, la clausura de La Bombonera por alegar que se había superado su capacidad de aforo”, expresa en el escrito.
“Dadas las circunstancias del caso, el club considera que dicha acción evidencia animosidad contra la institución, algo que se ha reiterado sugestivamente en varias oportunidades en lo que va del año”, agrega el escrito que generó la inmediata reacción de los hinchas de Boca, que atraviesa un particular momento teniendo en cuenta que el 2 de diciembre habrá elecciones.
No es la primera vez que ocurre esto en Boca y seguramente, por esa razón, es que hablan de “animosidad”. En febrero de este año, la tercera bandeja fue cerrada debido a deficiencias en la estructura edilicia.
Además, la problemática relacionada con la capacidad del estadio y la venta excesiva de entradas ha sido un tema central, con la investigación de la fiscal Celsa Ramírez centrada en la figura de Cristian Riquelme, hermano del vicepresidente y actual candidato a presidente del club, Juan Román Riquelme.