El gobernador Sergio Ziliotto cuestionó la decisión del Gobierno de Javier Milei de abrir las importaciones de productos alimenticios y alertó que la medida podría extenderse a otros sectores de la economía. “Vamos camino nuevamente a un industricidio porque vamos a dejar de producir alimentos”, dijo en la sede de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came), donde se reunió el Consejo Patagónico de Desarrollo Económico.
Según estableció el Gobierno nacional bajarán los plazos de pago para la compra desde el exterior de productos de la canasta básica y suspenderán, por el plazo de 120 días, el cobro de la percepción de IVA adicional y Ganancias a las importaciones de esos bienes y de los medicamentos. Incluye banana, papas, carne de cerdo, café, atún, cacao, insecticidas, champús y pañales, entre otros.
Ziliotto fue consultado en conferencia de prensa sobre las consecuencias de la apertura de las importaciones. “(La medida) Se va a profundizar a otros sectores. Son recetas que ya las vimos y lamentablemente sabemos cuáles son las consecuencias”, manifestó.
“Nosotros planteamos una agenda de desarrollo. No podemos ir a una nueva primarización de la economía. Hay que producir más y, además, ponerle valor en origen”, dijo.
La reciente decisión del Gobierno nacional de implementar medidas de apertura en las importaciones de alimentos generó preocupación en diversos sectores industriales, quienes expresaron reservas respecto a los posibles impactos que esta acción pueda tener en la economía nacional.
Si bien la intención que expresaron desde el Gobierno es reducir los precios en las góndolas, diversos actores económicos recordaron que esta medida ya se implementó, y no funcionó. En este sentido, los industriales resaltaron que la implementación de aperturas sin controles, tuvo consecuencias lamentables para la producción nacional.
Ante el reproche, la Secretaría de Comercio sostuvo que la decisión del Gobierno responde a alentar la importación de productos de la canasta básica cuyo precio en el mercado local sea superior al precio internacional, lo que contribuirá a una mayor competencia y, en consecuencia, a una caída en la inflación y en el nivel de precio de estos productos.
Por lo pronto, el presidente de Came, Alfredo González, dijo que la apertura de importaciones alimentarias será una “competencia desleal” para las Pymes argentinas.