Patricia González, madre de un adolescente de 13 años que nació con pectus excavatum, reveló su estado de desesperación porque su hijo está en “situación de cirugía urgente” aunque la intervención no se puede llevar a cabo debido a que la obra social denegó esa cobertura. La incisión tiene un costo superior a los cinco millones de pesos, sólo contando los materiales, que la familia no puede afrontar.
El periplo para mejorar la calidad de vida de Felipe lleva varios años, entre estudios médicos, consultas y tratamientos tanto en nuestra provincia como en Buenos Aires. En 2018, a la afección pulmonar que oprime su tórax, se sumó un cuadro de asma con laringitis crónica promovida por reflujo gástrico y nódulos cordales. Ya en 2021 la situación del paciente se terminó de complicar porque dejó de responder a los tratamientos y desde entonces no presenta mejorías. “Ciertos días está tan atacado que debemos apelar a la utilización de derivados de la morfina, con lo maliciosa que es esa droga, para contrarrestar los ataques que padece”, comentó la progenitora desde Intendente Alvear, lugar de residencia de la familia que se completa con el padre y cuatro hermanas de la víctima.
El cuadro de debilitamiento que afecta al chico lo hizo llegar a sufrir también el virus de la tos convulsa, que en nuestro país está muy controlado porque integra el grupo de patologías que forman parte del calendario obligatorio de vacunación.
Mientras tanto, el diagnóstico final de la enfermedad fue dado a conocer a los padres el 5 de marzo, luego de un exhaustivo informe requerido por profesionales del hospital Lucio Molas. “Nos dijeron que padece pectus excavatum grave asimétrico con compresión cardíaca, algo que pone a mi hijo en situación de cirugía urgente”, aseguró desesperada la mujer.
El pectus excavatum es una afección donde las costillas y el esternón (hueso central del pecho) crecen hacia adentro, lo que genera una deformación en el pecho. Esto da al pecho un aspecto ahuecado o cóncavo; por eso, esta afección también se conoce como pecho en embudo o pecho hundido. A veces, las costillas inferiores sobresalen con respecto a las demás, como si fueran unos alerones. Se desconoce qué es lo que provoca esta afección.

Indicó que cuentan con una obra social de los empleados de comercio, que 48 horas después de recibir el parte médico y el pedido de cobertura para la cirugía, denegó la prestación para La Pampa y, a cambio, les ofreció un turno en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con la adversidad de tener que efectuar nuevamente todos los estudios. “La obra social argumenta que su médico auditor quiere conocer la procedencia de la cirugía, inadmisible”, se quejó en contacto con Diario Textual.
No conforme con la respuesta de la cobertura médica, la familia interpuso un recurso judicial, cuyo amparo salió favorable el 27 de marzo, aunque pendiente hasta tanto el núcleo familiar presente una caución personal. “Nos piden una garantía económica, que no tenemos porque somos humildes trabajadores, o que el abogado firme como garante”.
Día de la operación
“Estamos en esa lucha. Hoy era el día de operación de mi hijo, que quedó sin efecto porque Salud Púbica no puede intervenir porque la obra social está siendo una barrera que no piensa en la salud del paciente ni nada”.
Manifestó que el menor acude al colegio, que es “muy responsable con eso”, y que a veces juega al vóley para fortalecer sus miembros superiores. “Juega una vez a la semana con sus amigos, pero no puede exigirse demasiado”.
Los médicos expresaron que la cirugía es clave porque le mejorará la calidad de vida y de no realizarse padecerá “consecuencias graves” a nivel cardiológico porque se le debe “mejorar la compresión cardíaca”. “Se trata de una operación larga, que puede durar hasta siete horas, y se realiza en el René Favaloro de Santa Rosa, donde está el equipamiento y el recurso humano esencial, más allá de los materiales que corren por cuenta de la aseguradora médica que pido que cumpla por favor”, imploró.