A última hora del martes y luego de un largo día de expectativas, el Gobierno envió finalmente los borradores de la nueva Ley Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos y del pacto fiscal. Se trata de los textos que el oficialismo pretende que se debatan conjuntamente en la Cámara de Diputados en los próximos días y que, además de los cambios acordados durante las negociaciones con la oposición “dialoguista”, cuenta con otras modificaciones que no habían trascendido.
Las principales tienen que ver con el futuro de la obra pública, las normas que regulan los hidrocarburos, el flamante régimen de grandes inversiones y el impuesto a las Ganancias.
El borrador de la ley tiene un total de 279 artículos y contempla la posibilidad de que las autoridades nacionales les entregue a sus pares de las provincias el manejo de las obras públicas que ya estén avanzadas, para que las jurisdicciones las puedan completar con fondos propios.
Precisamente el Gobierno de Sergio Ziliotto pretende reactivar las obras abandonadas por Nación en La Pampa.
Ayer, los ministros de Hacienda y de Obras Públicas, Guido Bisterfeld y Julio Rojo, respectivamente, fueron a la Legislatura a responder las consultas de los legisladores y legisladoras sobre el proyecto de ley de reactivación de las obra pública.
Rojo dijo que el Ejecutivo deberá definir las “prioridades” y sostuvo que la continuidad de las casas, y en particular los barrios Procrear de Santa Rosa, General Pico y Toay, es fundamental. “La vivienda tiene un aspecto social que para todos es muy importante”, dijo.
Reveló que al día de hoy la deuda de Nación por obras abandonadas en La Pampa es de $20.200 millones de pesos. “Es un impacto monetario muy grande para la provincia”, afirmó.
Según el proyecto enviado por Casa de Gobierno, son 69 las obras, de las cuales 27 ya fueron terminadas (aunque falta cobrar) y 42 no se terminaron. A estas se suman el Acueducto Norte y el Procrear de Santa Rosa, General Pico y Toay.