Los conductores de los vehículos que usan la aplicación Uber en Santa Rosa se exponen a multas que pueden ascender hasta 2,2 millones de pesos.
La aplicación comenzó a funcionar la semana pasada. Para la municipalidad, lo hace en forma ilegal porque la regulación del servicio público de coches taxímetros y de remises en la ciudad de Santa Rosa está establecida por las ordenanzas N° 4226 y 2209, respectivamente, y sus modificatorias.
La semana pasada se registró la primera retención de un vehículo. ¿Cómo detectaron al auto? Fue coordinado por el Sindicato de Choferes de Taxis -que se opone a Uber- y la Dirección de Tránsito de Santa Rosa. El gremialista pidió el auto y, cuando llegó a destino, lo esperaban inspectores de Tránsito. En ese momento, ante la consulta de los empleados municipales, el “pasajero” dijo que había pedido el auto por Uber.
Aún no aplicaron una multa, pero el conductor del Cronos secuestrado –un plomero, que decidió bajarse la aplicación para “probar” y ganar unos pesos extra- podría exponerse a una multa millonaria.
En este caso, la multa está establecida por la ordenanza 4226, que indica hasta 1500 veces la bajada de bandera. Actualmente la bajada de bandera tiene un costo de $ 1.472, por lo que la sanción económica podría ascender a 2.208.000 pesos.
La sospecha es que la misma empresa es la que, en definitiva, se hará cargo del pago. Esa ha sido la estrategia que ha seguido en otras ciudades de país, al menos en el inicio de su desembarco, con el fin de ganar mercado.
La Cámara de Propietarios de Taxis de Santa Rosa ya avisó a Diario Textual que presentará una demanda para intentar frenar a la multinacional. Actualmente en la capital pampeana están habilitados 167 taxis y 32 remises.
Hay quienes lo ven como una amenaza, pero la empresa sostuvo que los quiere de aliados y pidió que se sumen a la app.
Lo que está en debate es si Uber es un servicio público de transporte y, por lo tanto, necesita de la autorización y regulación que tienen los demás servicios, o si se trata de un servicio de transporte entre privados al ser una empresa de tecnología.
Desde abril de 2016, cuando comenzó a operar en la Argentina, Uber sostiene que su operatoria es legal de acuerdo con el Código Civil y Comercial argentino que refiere a los contratos de transporte “entre privados” (como un servicio de flete o una empresa de traslado).