La Defensoría de Niños, Niñas y Adolescentes de La Pampa convocó en Toay a una reunión de la mesa de trabajo interinstitucional para abordar la situación de los niños y niñas que viven en la ecoaldea Chakra Raíz porque considera que se están produciendo “situaciones de vulneración de derechos” de los chicos y de las chicas. Concretamente, sobre la situación habitacionales, la educación y la salud.
Del encuentro participaron representantes del municipio, del Hospital Segundo Taladriz, de la Dirección General de Niñez, Adolescencia y Familia provincial, de la Dirección de Inclusión del Ministerio de Educación y del Juzgado de Paz.
La convocatoria se hizo en el marco de ley nacional N° 26.061 de Protección Integral de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes, y la adhesión provincial ley N° 2703. La reunión se llevó a cabo con el objetivo de abordar diferentes estrategias de intervención debido a situaciones de vulneración de derechos que han surgido en este último tiempo en el predio de la comunidad Chakra Raiz.
“Existe una profunda preocupación con respecto a las condiciones habitacionales del lugar en la que desarrollan sus vidas, niños, niñas y adolescentes, como así también la vulneración de derecho a la salud y a la educación”, dijo el municipio en un comunicado.
“Durante la reunión se debatieron distintos tipos de abordaje con el objetivo común de proteger, garantizar y velar por los derechos de los niños, niñas y adolescentes que allí habitan, los cuales resultan preponderante ante las distintas elecciones y decisiones que puedan adoptar los adultos responsables”, agregó la comuna.
Chakra Raíz habita desde octubre de 2015 un predio de Toay, con familias que han construido sus casas, sin contar con servicios públicos.
Esas tierras están a nombre del Estado, que en su momento pretendió desalojarlos para construir allí casas sociales.
Los integrantes de la ecoaldea, frente a una denuncia penal de hace unos años, fueron procesados por el delito de usurpación de tierras. Pero posteriormente los absolvieron.
Este grupo de personas se propone tener un tratamiento responsable de los ciclos naturales respetando las especies nativas, reaprendiendo la construcción con barro, reciclando, usando medicina natural y criando a los niños en ambiente saneado y protegido, según explicaron sus integrantes.
Pretenden brindar a los niños y niñas una formación cosmogónica y amiga del medio ambiente.