El operario que se encontraba internado en grave estado luego de haberse metido a una boca de tormenta para intentar salvar a su compañero, que también murió, falleció en la noche del miércoles, confirmó a Diario Textual el fiscal Andrés Torino.
El trabajador se encontraba desde el martes internado en terapia intensiva del Hospital René Favaloro en estado crítico. Y anoche falleció. El motivo fue la inhalación de sulfuro de hidrógeno, un gas tóxico que proviene de las cloacas.
La autopsia a la primera víctima arrojó que murió por “anoxia cerebral, insuficiencia respiratoria y asfixia por inhalación de sulfuro de hidrógeno”.
El hecho ocurrió cerca de las 13 horas del martes último. Un operario, de 24 años de edad, bajó al sistema cloacal y se mareó por los gases tóxicos, en la esquina de las calles Jujuy y Río de La Plata, en Santa Rosa. Un compañero, de 27 años, intentó rescatarlo, pero también fue afectado por esos gases.
Para el rescate de ambos fueron convocados los bomberos. Ambos trabajadores fueron internados en el Hospital Favaloro. Esa misma tarde se confirmó la muerte del joven de 24 y un día después la de su compañero de 27.
Uno de los bomberos, de 36 años, fue hospitalizado: al bajar a la boca de tormenta, accidentalmente, se le desplazó la mascarilla y aspiró gases tóxicos. Había sido dado de alta, pero se descompensó y volvió a ser internado.
La autopsia a la primera víctima fatal arrojó que murió por “anoxia cerebral, insuficiencia respiratoria y asfixia por inhalación de sulfuro de hidrógeno”. Lo mismo para la segunda víctima fatal.