En el marco de la convocatoria del Gobierno nacional para renegociar deudas, algunas provincias, entre ellas Mendoza, prepara un reclamo a Nación por las regalías del complejo hidroeléctrico Los Nihuiles, sobre el río Atuel.
El Gobierno mendocino, que desde hace años incumple un fallo de la Corte Suprema que obliga a entregar a La Pampa un caudal mínimo de 3,2m3 del Atuel, ya anunció su intención de formar parte del Régimen de Reparación Federal. Y en ese marco, anticipó que buscará incluir los reclamos por las regalías de Los Nihuiles, el complejo hidroeléctrico formado por un conjunto de presas sobre el rio Atuel.
Ese complejo está integrado por un embalse (El Nihuil), un embalse compensador (el Valle Grande) y dos presas intermedias (Aisol y Tierras Blancas) y cuenta con una capacidad instalada de 265 MW, que representa el 0,6% de Argentina.
El ministro de Hacienda y Finanzas mendocino, Victor Fayad, recordó que hay un reclamo histórico de las regalías mal liquidadas de Los Nihuiles, que podrían ser parte del régimen de compensación de deudas siempre y cuando Nación las reconozca. Esa cifra sería de más de u$s550 millones, teniendo en cuenta que la queja incluye los retroactivos.
El gobernador Alfredo Cornejo exige que las regalías que percibe la vecina provincia de La Pampa -la mitad del total- pasen a manos propias. La pulseada ya fue judicializada tiempo atrás por el exgobernador Rodolfo Suarez ante la Corte suprema. Este año, Mendoza extendió la concesión del complejo por 12 meses, luego de que venciera la original, que se firmó en 1994 y se extendió por tres décadas.
La composición accionaria de la sociedad de Los Nihuiles es: Inversora Nihuiles SA (Pampa Energía SA): 90,27%, y otros accionistas menores: 52,04%, y Empresa Mendocina de Energía SAPEM: 47,96%.
Mendoza sostiene que ha sido perjudicada desde 1973 con el reparto en partes iguales de las regalías generadas por el Complejo Los Nihuiles a La Pampa.
La provincia cuyana quiere quedarse con todas las regalías porque argumenta que es la que tiene la “fuente”, es decir, donde se encuentra el salto de agua y se genera la energía.
La Pampa, sin embargo, sostiene que la Ley Nacional de Energía 15.336 terminó por abandonar la teoría del “salto o caída” de agua como fuente hidroeléctrica, beneficiando en adelante a muchas provincias condóminas y que no cuentan con las centrales de energía en sus territorios.
El exdiputado nacional del radicalismo Martín Berhongaray, en su momento, lo explicó muy bien. “Las usinas de los Nihuiles -dijo- se encuentran emplazadas en las aguas represadas del río Atuel que reviste carácter interprovincial y que pertenecen en parte a la provincia de La Pampa, conforme lo declaró la Corte Suprema de Justicia de la Nación en 1987. De nada importa que ‘el salto’ se ubique en territorio de la provincia de Mendoza. El agua que atraviesa a más de una provincia determina su derecho a percibir regalías hidroeléctricas”, argumentó.