La amenaza de Luciano di Nápoli de presentar una lista propia, por fuera de la llamada “lista de unidad” para los cargos del Consejo Provincial del PJ, está generando malestar. Y mucho. “Hay bronca y puteadas. ¿Con qué necesidad va a romper cuando se está ante la posibilidad de recuperar un diputado nacional en octubre?”, dijo un dirigente, quien pidió reserva de identidad. “Pone en peligro la unidad con una interna sin sentido”, elucubró otro dirigente.
Di Nápoli pretende mantener al menos tres lugares en el Consejo del PJ. Pero alejado del kirchnerismo y sin línea interna, esos lugares están en peligro. Por eso, elucubraron fuentes partidarias, está presionando a Sergio Ziliotto, presidente del PJ, para que le garantice sillas en el consejo.
En rigor, leyeron otros dirigentes, la presión es hacia toda la estructura del peronismo. Incluso hacia Carlos Verna, líder de la línea Plural y primer candidato a congresal.
Desde el sector de Verna, por lo pronto, mandaron una señal clara: uno de sus alfiles, el poderoso diputado provincial Daniel Lovera, ya firmó su candidatura a secretario general del PJ.
A su vez, Jorge Lezcano y Roberto Robledo, de las líneas Identidad Peronista y del NEP, respectivamente, ya entregaron los avales para la lista de unidad. Uno de los datos salientes es que Lezcano, socio de Di Nápoli en la ciudad, no se sumó a la estrategia de hacer interna.
Luciano, en tanto, tendría el apoyo de un grupo de dirigentes sindicales. Entre ellos, José Bocalatte (taxis), Lucas Corral (farmacias) y Aníbal Schmidt (gráficos).
Anoche Diario Textual confirmó que, en un abierto desafío, pretende la presidencia de partido que hoy está en manos del gobernador Sergio Ziliotto. Incluso amenaza con ir por el cargo de delegado departamental por Capital que mantiene Marcelo Pedehontaá, un delfín ziliottista.
En principio, Di Nápoli se presentará como candidato a presidente del PJ. También quiere disputar la vicepresidencia, la secretaría general y las doce vocalías titulares.
No están en carpeta las unidades básicas. Pero sí, dijeron fuentes cercanas a Di Nápoli, al cargo de delegado departamental por Capital.
El plazo para presentar lista vence el 30 de abril. En las próximas horas se sabrá si la sangre llega al río. Ya este viernes 25 se espera que se terminen de presentar los avales de la llamada lista de “unidad”, sin Luciano.
La situación pone en crisis el intento de acuerdo que se había alcanzado en el peronismo. En el Consejo Provincial del PJ se acordó recientemente tratar de llegar a una lista de unidad; que se respetará la distribución actual; y que cada una de las líneas internas mantendrá la cantidad de cargos. Además, decidieron sumar a la conducción del consejo a una nueva línea interna, representada por el exdiputado e intendente de Realicó, Facundo Sola.
Di Nápoli, presente en la reunión del Consejo del PJ, no se mostró en desacuerdo con ese supuesto acuerdo, según contaron fuentes del partido. Pero luego comenzó a reclamar lugares: actualmente tiene tres asientos (él, Carmina Besga y Heriberto Mediza).
En el marco de este tironeo, los kirchneristas -La Cámpora y socios- pusieron a disposición uno de sus cargos (actualmente retienen 6, incluso dos delegados departamentales). “Ya estoy representado dentro del peronismo, así que no me tienen que ceder nada…”, respondió en las últimas horas el jefe comunal.