El intendente santarroseño Luciano di Nápoli anunció este martes, luego de que se le cayera la posibilidad de competir por los cargos del Consejo Provincial del Partido Justicialista, que bajó todas las listas que quedaban en carrera y sostuvo que él y sus dirigentes renunciarán a todos los cargos representativos del peronismo. De todas maneras, aseguraron que no se van del PJ y que harán campaña por los candidatos a legisladores nacionales en las elecciones legislativas del mes de octubre. Además, cuestionaron el modelo histórico del peronismo en La Pampa.
Ya la semana pasada, Diario Textual había advertido que Di Nápoli, al dar por hecho que no podía participar por los cargos provinciales del peronismo, sopesaba bajar las listas del Consejo Local de Unidades Básicas y de las unidades básicas santarroseñas. Hoy lo confirmó el propio “Copete”.
Di Nápoli, quien se postulaba a la presidencia del PJ, hizo el anuncio en una conferencia de prensa, junto a Shirley Bustos (dirigente sindical bancaria y que se postulaba a la vicepresidencia del partido) y Manuel Feito (intendente de Lonquimay y que se candidateaba a secretario general). El intendente santarroseño, al comenzar la conferencia de prensa, relató cómo surgió la posibilidad de conformar una lista propia. “Es un proceso que se inicia el 25 de marzo, con un llamado a elecciones desde el Consejo Provincial del PJ. Es algo que no compartíamos, en un año electoral, y así lo hicimos saber. La Carta Orgánica del PJ establece mecanismos para saltar esa posibilidad, como por ejemplo llamar a un congreso para prorrogar los mandatos”, dijo. “Por eso propusimos prorrogar los mandatos. Y no fuimos los únicos: hubo otros dirigentes de otros sectores que dijeron lo mismo. De todos modos, se hizo el llamado a elecciones. Y en ese marco, decidimos participar. En algún momento se intentó la charla, para ver si había consenso, pero no se logró”, sostuvo.
“Es decir, se hizo un llamado a elecciones sin los consensos necesarios y con la premisa de que, si alguien quería competir en contra, no se lo iba a dejar participar. Esto estuvo pensado y diseñado desde el día 1”, dijo.
“Con el llamado a elecciones, vimos una oportunidad para poder manifestarnos y dar estos debates, a pesar de que considerábamos que no era el momento oportuno”, sostuvo.
“La sentencia estaba definida antes de jugar el partido”, se lamentó. “La Junta Electoral del PJ, con argumentos totalmente falaces, no nos dejó participar. Han bajado la lista de Renovación Peronista a nivel provincial y en la unidad básica de Villa Santillán”, agregó.
“Si proscriben a nuestro conductor, nos proscriben a todos”
Posteriormente, una militante leyó un documento con críticas directas a Sergio Ziliotto y al resto de la conducción partidaria. En otro golpe de efecto y en un duro documento que lleva la firma de los integrantes de su lista Renovación Peronista, cuestionaron la bandera histórica del “modelo de provincia” que ha permitido al peronismo retener la gobernación desde hace cuatro décadas. Un posicionamiento que pone en debate el “modelo” del que se jacta el PJ pampeano y que han sostenido, desde 1983, Rubén Marín, Néstor Ahuad, Carlos Verna, Oscar Jorge y Sergio Ziliotto.
De esta manera, los dardos no solo alcanzaron a la gestión de Ziliotto: también apuntaron al propio Verna, que viene defendiendo este “modelo de bienestar” en La Pampa. Este modelo del que hablan Ziliotto, Verna y compañía es el de intervención del Estado, con inclusión a los sectores vulnerables, pero también con promoción de la actividad económica para impulsar la industrialización y sostener el empleo y el consumo.
En el documento, en forma contundente, pidieron discutir la concepción del peronismo. De esa manera, se marcaron tres “cuestiones centrales” a tener en cuenta:
1- “Qué PJ necesitamos para construir un modelo de provincia que lleve a La Pampa hacia un desarrollo que incluya a la mayoría de los pampeanos.
2- “Cómo asumirá nuestro partido el protagonismo para articular a todos los sectores en pos de ese modelo”.
3-“Cómo nos insertamos en el Proyecto Nacional en un mundo en crisis y en tiempos de cambios vertiginosos”.
“La ‘unidad’ puede ser una cortina de humo. Una etiqueta que oculte las verdaderas inquietudes de quienes, no pudiendo revalidar sus títulos en una elección, utilizan las herramientas institucionales del partido en función de una estrategia, que no sabemos favorable a qué ni a quiénes”, apuntaron.
“Nosotros creemos que se necesita un PJ con mirada de mediano y largo plazo. Que se apoye en nuestra historia y elabore un proyecto de Provincia para los años que vienen. Un partido más fuerte, más amplio, más activo y participativo, más joven, más moderno y más ágil para enfrentar los desafíos arriba planteados”, dijeron.
“Nos expresamos en plural. Lo hacemos en nombre del enorme conjunto de compañeros y compañeras que hizo nacer la Lista 17 de la Renovación Pampeana Peronista. Esta no es la lista de nadie en particular, porque nadie ‘es’ de un dirigente, ni de dos, ni de tres. Está lista ha hecho visible un movimiento subterráneo que fue creciendo por la enorme cantidad de veces en las que no nos hemos dado la oportunidad de debatir las estructuras de conducción partidaria”, expresaron. “La integran más de 300 candidatos, y más de 5.000 afiliados la avalaron. Esos números no nacen de un día para otro”.
“No fuimos nosotros los que elegimos el momento para un llamado a elecciones en el seno del PJ. La fecha, la forma, la convocatoria y el ‘supuesto consenso’ para realizar este llamado fue absoluta responsabilidad de los dirigentes que en la reunión del 25 de marzo, de manera apresurada, resolvieron convocar a renovar la conducción partidaria. ¿Cuál era el apuro?”, se preguntaron.
“Teniendo por delante las elecciones de octubre, creíamos que era preferible postergar para el año que viene éste debate, en aras de concentrar los esfuerzos en la elección nacional”, dijeron. “¿Había alguna alternativa? Por supuesto. Siempre hay alternativas. En otras oportunidades se han prorrogado los mandatos de las autoridades partidarias. Oímos también en éstas semanas argumentos ‘mediatizados’ respecto a que las elecciones eran una obligación formal que el partido no podía eludir. Eso es falso”.
“¿Pensaban llamar a una elección y que no hubiera compañeros y compañeras que quisieran discutir los niveles de representación interna? Eso es desconocer la realidad de los territorios. A los hechos nos remitimos. Si eso quisieron, no lo lograron”, dijeron. “Reiteramos. Nosotros no elegimos el momento para dar éste debate, aunque somos una expresión evidente de que hay debates que no se vienen dando”.
“La renovación en el PJ de nuestra Provincia no se puede resolver en una mesa de acuerdos entre dirigentes en función de una, dos o las sillas que sean; como si las necesidades de la participación militante fueran una ecuación matemática”, lanzaron.
“No podemos subordinarnos a viejos métodos que desde una supuesta ‘cumbre’ deciden el derrotero del partido y el futuro de los afiliados”, expresaron.
“Queremos seguir trabajando desde las bases y en este sentido: las elecciones internas hubieran significado una señal de salud partidaria y la apertura de un canal institucional y democrático para saldar parte de los debates que nos debemos en el peronismo. Para que sean los afiliados quienes decidan sobre el futuro”, dijeron.
“La Junta Electoral, al reproducir en su decisión para no oficializar nuestra lista, los argumentos de la impugnación de la Lista 1, cumplió un mandato no escrito: no tiene que haber elecciones. La Lista 17 no acepta cómo válidos argumentos más proclives a la proscripción que a la participación. Por este motivo y ya que, misteriosamente, solo se nos permite participar en unas pocas categorías, comunicamos que la decisión definitiva e irrevocable de la Lista 17 es retirarse de todas las categorías: provinciales y locales. Para todos los cargos”, dijeron. “Si proscriben a nuestro conductor, nos proscriben a todos”, agregaron.
Además, pegaron el portazo en todos los cargos del peronismo. “Anunciamos también que todos los compañeros y compañeras que forman parte de la Lista 17 renunciarán inmediatamente a los cargos de representación institucional que tienen actualmente en el partido”, sostuvieron.
“En modo alguno éstas renuncias a los cargos de representación institucional significan el alejamiento del Peronismo. Las banderas e ideas que nos conducen y nos orientan como peronistas nos obligan a seguir luchando y a trabajar para reconstruir un Partido abierto a las diferencias y a las nuevas voces”, aclararon.
“Nos retiramos de los órganos de conducción del Partido porque no queremos ser parte de un PJ que excluya. Queremos ser parte de un Partido que honre la historia política de nuestro país, el que defendió la democracia en todas las circunstancias. Ser parte de un Partido que entiende que la democracia interna es el mecanismo virtuoso que tiene una conducción para contener a todas las miradas en pugna”, dijeron. “Y por sobre todo un Partido que respeta el derecho de los afiliados y afiliadas a elegir y ser elegidos”.
“Nadie está rompiendo nada. Por el contrario, estamos dejando las manos libres a la actual conducción del Partido para que pueda abocarse sin interferencias a definir candidaturas, construir consensos, organizar la campaña y garantizar a nuestro partido las dos bancas de diputados que necesita en las elecciones en octubre”, sostuvieron.
La carrera al 27
Manuel Feito, el intendente de Lonquimay, dijo que no están pensando aún en la carrera para la gobernación de 2027. “Es muy prematuro para plantearlo”, dijo. “Sí hoy estamos afuera de la estructura del PJ. En el momento oportuno, lo definiremos”, sostuvo.
Feito dijo que, pese a mostrarse junto a Di Nápoli y participar de su lista, sigue en la línea Plural, que responde a Carlos Verna. La Plural, por lo pronto, está alineada, como el resto de las 6 líneas internas, en la llamada lista de unidad que comanda el gobernador Sergio Ziliotto.
“Creemos que hay que movilizar. Yo pertenezco a la Línea Plural y considero a Verna un líder indiscutido. Hace rato que no hablo, pero me gustaría mucho saber qué piensa de lo que está sucediendo”, agregó Feito.
Ahora se espera, al tenor de sus palabras, que renuncie a la presidencia de la Unidad Básica de Lonquimay. Y también a su postulación a la lista de unidad por la presidencia de la UB (iba de candidato, llamativamente, en la lista de unidad).
Qué dijo la junta sobre la “proscripción”
Este lunes, la Junta Electoral del Partido Justicialista finalmente bajó a la lista Renovación Peronista para los cargos del Consejo Provincial del PJ, que encabezaba el intendente santarroseño. De esta manera, solo quedó en carrera la lista de “unidad”, Peronismo Pampeano, que integran las 7 líneas internas peronistas y que comanda Sergio Ziliotto.
Según comunicó la junta, “no cumplían con los requisitos exigidos por la Carta Orgánica y el Reglamento” del PJ, además de la jurisprudencia. Concretamente, la junta consideró que presentó una lista incompleta y que tanto la precandidata a vicepresidenta como el precandidato a secretario suplente no cumplían el requisito de tener un mínimo de dos años de antigüedad como afiliados.
Incluso la junta lo “retó” a Di Nápoli por decir que lo pretendían proscribir. “Hablar de proscripción a tenor de todo lo expuesto resulta absolutamente grave, puesto que dicha palabra precisamente en nuestro partido con la historia transitada resulta además de imprudente e inverosímil, que de ninguna manera puede ser banalizada para justificar un incumplimiento normativa por parte de quien la expresa”, sostuvo en uno de los párrafos de su resolución, a la que accedió Diario Textual.
Cómo fue la escalada
El armado político de Di Nápoli viene de hace meses, pero todo se precipitó en las últimas semanas.
El mes pasado, en el Consejo Provincial del PJ se había acordado -o al menos se creía que se había acordado- presentar una lista de unidad, con la actual distribución de cargos por línea (además, decidieron sumar a la conducción del consejo a una nueva línea interna, representada por el exdiputado e intendente de Realicó, Facundo Sola).
Di Nápoli no se mostró en desacuerdo con ese supuesto acuerdo, según contaron fuentes del partido a Diario Textual. Pero, luego, comenzó a reclamar lugares para su gente.
El problema radica en que Luciano hace dos años que no integra más La Cámpora ni si identifica como kirchnerista. Además, no hizo ninguna línea interna.
Por eso, frente a sus amenazas de ir a internas, le hicieron una serie de ofrecimientos. El último, por tres lugares en el consejo. Pero los rechazó y presentó listas propias.