El pueblo de Naicó cumple hoy 114 años. Fundado un 28 de mayo, del año 1911, a la vera del ramal ferroviario que unía La Pampa con Buenos Aires, más precisamente la ciudad portuaria de Bahía Blanca, fue un poblado que dependió mucho del tren, ya que sus principales actividades económicas fueron los aserraderos y la crianza de animales.
El pueblo -ubicado a unos 45 kilómetros al sur de Santa Rosa- llegó a tener unos 600 habitantes y, cuando nació, fue bautizado como “Ministro Lobos – Estación Naicó”, en honor al ministro de agricultura del presidente Roque Sáenz Peña: Eleodoro Lobos.
Pero su nombre actual sigue siendo Naicó, que traducido del idioma mapuche quiere decir “Manantial Salado”. Quizás los antiguos habitantes decidieron nombrarlo así por el hermoso manantial que recorre sus campos, formando un arroyito que pasa por “Puente Negro” y nace la laguna del Parque Luro.
Contaba con una escuela, un registro civil, un juzgado de paz, un almacén de ramos generales y hasta una comisaría. Hoy hay un puesto policial.
El pasó de la ruta nacional N°35 a varias leguas del pueblo y el cierre del tren de pasajeros hicieron que sus esperanzas se fueran desvaneciendo. El éxodo fue creciendo de a poco, porque algunos habitantes tenían la esperanza de seguir viviendo en el lugar, ya que el tren carguero que paraba en Naicó, seguía su circuito: de ida viajaba a Bahía Blanca y de vuelta lo hacía a Toay, la cabecera del ramal, a tan sólo diez kilómetros de Santa Rosa. Pero, como en tantos otros poblados del país, la frase “Ramal que para, Ramal que cierra” del entonces presidente Carlos Menem, los golpeó de lleno. El ramal fue cerrado y los habitantes del lugar se vieran obligados a buscar otros rumbos.
Hoy es uno de los pueblos más chicos de la provincia, con unos 11 habitantes. Actualmente el lugar es usado por el Ejército Argentino para prácticas militares, con muy poquitas personas que crían animales y algunos apicultores. Todos, con la esperanza de que algún día vuelva el tren.
En los campos de la zona, además de la cría de ganado bovino, se desarrolla la actividad cinegética, con especies introducidas como ciervos colorados, jabalíes europeos y antílopes negros de la India, entre otros.
En el pueblo hay un hostal y recientemente se inauguró una oficina turística. De todas maneras, la actividad turística no está muy desarrollada. Se puede recorrer el cerro de la Virgen “Santa María de La Pampa” (246 m.s.n.m), donde se puede observar un hermoso valle rodeado de montes bajos, el salitral donde nace la laguna del Parque Luro y hasta su castillo.
Naicó sigue allí, a 45 kilómetros al suroeste de Santa Rosa, con sus hermosos paisajes y sus viejos edificios que están prácticamente en ruinas, producto del paso de tiempo y los vándalos/as que no cuidan nuestro patrimonio cultural.
Colaboración de César Gatica.
