El jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo Francos, desechó este domingo la posibilidad de aceptar el proyecto impulsado por los gobernadores para liberar los fondos retenidos de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y hacer una nueva distribución del impuesto a los combustibles. Las provincias vienen denunciando las retenciones ilegales de esos fondos y sostienen que su propuesta no afecta el supuesto superávit fiscal. “El equilibrio fiscal es un objetivo innegociable”, afirmó en declaraciones a Radio Rivadavia.
Los dichos de Francos se producen luego de que los mandatarios provinciales, encabezados por el pampeano Sergio Ziliotto, anunciaran que presentarán en el Congreso una iniciativa consensuada para redistribuir esos fondos, con el argumento de que no afectan las finanzas nacionales ni comprometen el superávit fiscal que defiende la administración de Javier Milei.
“No podemos aceptar esa propuesta en función de la necesidad de mantener el equilibrio fiscal”, sostuvo Francos. Sin embargo, abrió la puerta a un posible diálogo. “Estamos evaluando alternativas que permitan llegar a un acuerdo. Si no lo logramos, se debatirá en el Congreso y ahí cada sector buscará sus consensos”, señaló.
Para el Gobierno, los cambios propuestos por las provincias comprometerían los números del plan económico liderado por el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo. En este marco, Francos también recordó que el Ejecutivo tiene como meta avanzar hacia una nueva ley de coparticipación federal, uno de los puntos planteados en el denominado “Pacto de Mayo”.
“Han pasado más de 30 años desde la reforma constitucional de 1994 y nunca se logró un acuerdo en este tema”, cuestionó el jefe de Gabinete. Además, insistió en que el Gobierno buscará impulsar una “nueva arquitectura tributaria” y una “reforma laboral” para “mejorar la competitividad”, con la mira puesta en consolidar una nueva mayoría parlamentaria en las elecciones de 2025.
Por su parte, el gobernador Sergio Ziliotto defendió el martes pasado el proyecto que impulsan las provincias y aseguró que no pone en riesgo el equilibrio fiscal nacional. “Hasta ahora hemos administrado la crisis con eficiencia, pero necesitamos mayores recursos”, advirtió en una conferencia de prensa.
De prosperar la iniciativa, La Pampa recibiría unos 57.000 millones de pesos adicionales al año, precisó el mandatario.
Ziliotto sostuvo que la crisis económica actual “afecta a todas las provincias, sin distinción política”, y que está marcada por dos factores: “una mayor carga de responsabilidades en la prestación de servicios públicos y una caída significativa de los recursos”.
“No le estamos pidiendo plata al Gobierno nacional. Lo que reclamamos son fondos que ya nos pertenecen: el impuesto a los combustibles, que tiene asignación específica para infraestructura vial e hídrica, y los ATN, que provienen de la detracción de la coparticipación a las provincias”, explicó.
El gobernador también comparó la situación actual con los peores momentos de la pandemia. “Hoy, en términos reales, las provincias tienen muchos menos recursos que en la pandemia”, afirmó, y cuestionó los argumentos del oficialismo: “No pueden decir que quienes defienden el federalismo son los ‘degenerados fiscales’ que quieren desfinanciar al Estado nacional”, concluyó.
