La Municipalidad de Santa Rosa continúa con los operativos de compactación de caños de escape adulterados. En esta oportunidad, se destruyeron 34 dispositivos en infracción, como parte de una estrategia integral de control ambiental y sonoro.
Con el propósito de reducir la siniestralidad vial y los niveles de contaminación sonora, la Municipalidad de Santa Rosa realizó una nueva jornada de compactación de caños de escape no reglamentarios.
En esta oportunidad, se destruyeron 34 dispositivos incautados durante controles realizados por personal del área de Tránsito. Los operativos se llevan a cabo en respuesta directa a pedidos concretos de la comunidad, y se desarrollan en el marco del cumplimiento de las ordenanzas N° 278/75 y 3846/08, que regulan los niveles permitidos de emisión sonora.
Guillermina Castro, directora de Tránsito del Municipio, explicó que este tipo de intervenciones forman parte de “un trabajo sostenido de control vehicular” que llevan adelante en distintos puntos de la ciudad. “El uso de escapes no autorizados altera gravemente la convivencia urbana, genera molestias en los barrios y contamina el ambiente. Por eso seguimos profundizando estas medidas, que apuntan a fomentar un entorno urbano más saludable en la ciudad”, dijo.
El procedimiento incluye la medición de decibeles emitidos por los vehículos. Cuando se detectan niveles por encima de lo permitido o alteraciones mecánicas en el escape, se procede a la retención y posterior destrucción del artefacto.