En una ciudad que crece con el pulso constante del esfuerzo local, dos hermanos han logrado consolidarse con un sello de seriedad, compromiso y profesionalismo. Luis Alberto y Miguel Ángel Lasfille son los fundadores y actuales propietarios de Lasfille Bienes Inmobiliarios, una firma que, desde su creación en 2018, no ha dejado de afianzarse en el competitivo ámbito de los negocios inmobiliarios en General Acha y más allá.
“Nuestro objetivo es estructurar una empresa de servicios con perfil profesional, con la aspiración de expandirnos”, explica Miguel Ángel, al dejar en claro que la visión de ambos va mucho más allá de lo meramente comercial. Desde su oficina recientemente inaugurada en Larrea 168, en el corazón de General Acha, los hermanos Lasfille apuestan a elevar los estándares del rubro inmobiliario local, respaldados por una formación integral que combina experiencia práctica, capacitación legal y técnica, y una ética empresarial sólida.
“La firma nace en 2018, pero nuestra trayectoria viene de antes”, señala Miguel Ángel. “Hemos trabajado tanto en comercialización de hacienda como en el sector inmobiliario rural, colaborando con una empresa española del sector y también con la firma Manuel Lanusse SRL. Esa experiencia, sumada a nuestra capacitación profesional, nos permite brindar un servicio que prioriza el conocimiento del negocio y la rentabilidad para nuestros clientes”.
Por su parte, Luis Lasfille destaca el espíritu con el que se constituyó la firma. “Cuando comenzamos a construir Lasfille Bienes Inmobiliarios lo hicimos pensando en un modelo de empresa seria, con conocimiento del mercado, que no sólo cierre operaciones sino que deje a nuestros clientes con la satisfacción de haber hecho un buen negocio, sea comprando o vendiendo”, sostiene.
La seriedad de su propuesta se manifiesta no solo en su trabajo cotidiano, sino también en su integración activa al ámbito institucional. Son socios de la Cámara Argentina de Inmobiliarios Rurales (CAIR), una entidad que agrupa a los profesionales del sector a nivel nacional y que da cuenta del compromiso de la firma con las buenas prácticas y la profesionalización del rubro.
“Nuestra área de trabajo es toda la provincia de La Pampa”, amplía Luis. “Pero también colaboramos con colegas de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma. Hemos concretado operaciones fuera de la provincia, y lo más importante: nuestros clientes han quedado satisfechos. Para nosotros, eso es central”.
En tiempos donde el sector inmobiliario enfrenta desafíos de diversa índole, los hermanos Lasfille no dudan en alzar la voz para defender el ejercicio legal y responsable de la profesión. “En La Pampa hay muchas personas operando de manera informal. Es importante que la gente sepa que sólo quienes están matriculados en el Colegio de Martilleros y Corredores Públicos de la provincia están habilitados para cobrar comisiones. Cualquier otro caso es ilegal y puede ser denunciado”, advierte Luis.
También marcan posición respecto a los modelos de franquicias que se expanden bajo esquemas difusos: “La figura del ‘agente inmobiliario’ que utilizan algunas franquicias, como Remax, no tiene entidad legal en nuestro país. Esa actividad es ilegal. No lo decimos para polemizar, sino para informar y proteger tanto a los colegas matriculados como a los consumidores”, sostiene Miguel.