Los presidentes de los bloques de diputados volvieron a reunirse en las últimas horas por el proyecto de ley para autorizar la licitación del área hidrocarburífera El Medanito, pero ninguno se movió de sus posiciones. De esta manera, como había publicado Diario Textual la semana pasada, la iniciativa no saldría antes de las elecciones legislativas del 26 de octubre. Si es que sale.
“No hubo avances de ningún tipo. El peronismo no cede nada: es su dictamen o nada, ni siquiera permite que el proyecto vuelva a comisión para negociar”, resumieron desde la oposición. El dictamen del oficialismo, que establece regalías móviles de al menos entre el 15% al 20% -dependiendo de las inversiones- y un bono de ingreso de 50 millones de dólares, tiene 19 votos y solo le falta uno para la aprobación.
El proyecto presentado a fines de 2024 por el gobernador Sergio Ziliotto sigue en stand by, producto de la falta de acuerdo entre los bloques que integran la Legislatura. Cuatro diputados del Pro-MID se sumaron al dictamen del oficialismo. Sin embargo, dos legisladoras del mismo bloque macrista-mileísta siguen firme en su negativa: la especulación, en los pasillos en la Legislatura, es que no quieren regalarle al peronismo una victoria política antes de las legislativas. En el oficialismo, por lo pronto, no analizan por el momento hacer más concesiones.
La urgencia es cada vez mayor debido a que la actual empresa que explota el área, Petroquímica Comodoro Rivadavia (PCR), ya frenó las inversiones. PCR tiene contrato en El Medanito hasta junio de 2026. Eventualmente, si es que la ley no se aprueba entre este año y la primera mitad del próximo, se debería hacerse cargo del área la empresa estatal Pampetrol. De hecho, eso es lo que han sugerido los seis legisladores del peronismo que responden a Carlos Verna. Pero hay otra dificultad: por ley, la Legislatura debería aprobar un fortísimo endeudamiento a Pampetrol, para tomar e invertir en el área.
El PJ y las regalías móviles
El proyecto de ley requiere para su aprobación una mayoría especial, es decir, los dos tercios de la Cámara. El peronismo está a un voto de aprobar su dictamen, por el que pretende pedir a las empresas regalías móviles de al menos entre el 15% al 20%. Esa iniciativa tiene 19 voluntades -15 del peronismo y 4 del Pro-MID- y solo falta un voto.
La iniciativa, con la alícuotas diferenciadas, es la siguiente:
a- Por la producción básica de hidrocarburos líquidos y gaseosos hasta el fin de la futura concesión: 20%.
b- Por la producción adicional de hidrocarburos líquidos y gaseosos hasta fin de la futura concesión obtenidos a través de la perforación de nuevos pozos y workovers de pozos que se encuentren inactivos acreditados por la autoridad de aplicación: 17,5 %.
c- Por la producción adicional de hidrocarburos líquidos y gaseosos hasta fin de la futura concesión si se implementan proyectos de recuperación mejorada (secundaria y/o terciaria) acreditados por la autoridad de aplicación: 15%.
La propuesta de las dos “rebeldes” del Pro
Las miradas están apuntando desde hace días a dos diputadas del macrismo-mileísimo, Celeste Rivas y Noelia Viara, que en la sesión del jueves pasado -a la que concurrió una multitud integrada por 2500 petroleros y representantes de instituciones y empresas de servicios petroleros de 25 de Mayo- presentaron una propuesta propia. En rigor, un pequeño cambio sobre un dictamen que había firmado todo su bloque hace unos meses.
Ambas legisladoras mantienen su rechazo al dictamen oficialista y por eso revelaron una alternativa, que fue rápidamente desestimada por el peronismo.
El cambio sustancial que introdujeron es sobre la percepción de regalías: propusieron que si la oferta de regalías de una empresa es menor al 12%, la Mesa de Trabajo -conformada para evaluar las ofertas- está facultada a rechazarla o aceptarla. Antes, con el dictamen original del Pro-MID del mes de abril, la oferta prácticamente debía aceptarse. Aunque, por ejemplo, fuera de solo un 1% o -10%.
Con esta modificación, los oferentes podrían eventualmente proponer solo un 1% de regalías, cuando actualmente la empresa Petroquímica Comodoro Rivadavia paga alrededor del 35% (dependiendo del precio del crudo). O incluso, ya en un escenario totalmente absurdo, -10%, con lo cual La Pampa le tendría que pagar a la empresa concesionaria para sacar petróleo.
Hace unos quince días, afloró como nunca la interna dentro del bloque teñido de violeta a partir del acuerdo electoral con La Libertad Avanza: Rivas y Viara se desmarcaron públicamente de sus compañeros Laura Trapaglia, Lucas Lazaric, Enrique Juan y Matías Traba y denunciaron que la iniciativa impulsada por el oficialismo carece de “la transparencia necesaria” y que solo “beneficia a unos pocos”.
La respuesta desde la otra vereda del mismo bloque no se hizo esperar. Sus pares les reclamaron “responsabilidad” en el debate parlamentario y las acusaron de poner por delante “mezquindades políticas”. Aunque no lo expresaron de manera directa, dejaron trascender que detrás de la postura crítica de Rivas y Viara habría motivaciones vinculadas a las disputas internas del PRO: de un lado, la línea de Martín Maquieyra -a la que responden las legisladora que se han rebelado- y del otro, la de Carlos y María Alejandra Mac Allister. A este escenario se suman también los ruidos externos luego de la alianza sellada con La Libertad Avanza: Viara y Rivas no querrían regalarle una victoria política al Gobierno de Sergio Ziliotto antes de las legislativas del 26 de octubre.
“Nosotros siempre dijimos lo mismo. No hemos cambiado de posición”, se están intentando defender las dos legisladoras, como si dar el debate y tratar de consensuar, incluso cediendo posiciones, fuera una debilidad dentro de las negociaciones políticas.
La UCR y el data room
El radicalismo, en tanto, presentó su dictamen en el que pide que antes de avanzar en la licitación de El Medanito se presente otro data room, con una “consultora independiente”, con el fin de transparentar la información técnica, legal y económica del área petrolera, según dijeron.
El informe que requiere la UCR ya fue presentado por el Gobierno, por lo que desde el oficialismo consideran innecesaria la contratación de una consultora externa para elaborar uno nuevo.