El senador Nacional Daniel Bensusán fundamentó en el recinto de la Cámara Alta su rechazo al veto del presidente Javier Milei a las leyes de financiamiento universitario y de emergencia pediátrica. “No es un debate ni fiscal ni contable sino moral”, dijo. “Con la excusa del equilibrio fiscal, Nación pasa la motosierra cortando los derechos de quienes más lo necesitan: en este caso los estudiantes y los niños”, fustigó al presidente Javier Milei.
“El veto -dijo- es una decisión política deliberada y consciente que nos dice que para la universidad no hay plata, pero sí para unas diez exportadoras cerealeras en detrimento de los pequeños y medianos productores agropecuarios, que no hay para las becas pero sí fondos para los servicios de inteligencia. No hay para pediatría, para discapacidad, para jubilados pero sí para beneficiar a los más ricos con baja de impuestos y para los viajes que hace el Presidente a todas partes del mundo que no tienen ningún beneficio para los argentinos”.
Bensusán sostuvo que de lo que se trata es de “defender la igualdad de oportunidades para todos, porque para Milei solo puede estudiar el que tiene para pagarse una carrera y solo puede atenderse en los hospitales quien puede pagar una obra social privada”. Así, rechazó el proyecto del Gobierno Nacional, al que calificó de “motosierra que solo recorta los derechos de los que menos tienen”.
El senador pampeano también se refirió a la carta abierta que recibió de parte del Frente Universitario Pampeano que engloba a estudiantes, docentes, no docentes, y graduados, y que reivindica a la universidad pública como una inversión estratégica para el desarrollo regional y nacional. Coincidió en que la Universidad Nacional de La Pampa es un eje central para el desarrollo de la provincia y finalizó diciendo que rechaza el veto de Milei porque “siempre voy a apoyar a la universidad pública, de calidad, para que los docentes y no docentes puedan seguir trabajando y enseñando y para que más de dos millones de estudiantes puedan seguir estudiando y así generándose un futuro digno”.
“La universidad pública es el corazón de un proyecto de una Argentina para todos, de una Argentina inclusiva, por eso es que vamos a rechazar el veto e insistir con esta Ley de Financiamiento Universitario”, dijo.
En cuanto al Hospital Garrahan y la atención pediátrica, el senador sostuvo que negar recursos a la salud infantil representa un retroceso ético y social inaceptable. “Hablamos de la vida de miles de niños y niñas. Es inadmisible que el Gobierno recorte allí mientras destina fondos millonarios a beneficios para sectores concentrados”, expresó.
“Defender a las universidades públicas y al Hospital Garrahan no es una cuestión ideológica, es una cuestión de supervivencia nacional. Un país que abandona la educación y la salud pública es un país condenado al atraso y a la exclusión”, concluyó.