La provincia de La Pampa conmemora 21 años de la creación del proyecto destinado a proveer y distribuir oxígeno medicinal y 18 años ininterrumpidos de producción propia, una política pública inédita en Sudamérica por tratarse del único Estado subnacional que desarrolla de manera integral este recurso estratégico: produce, envasa y distribuye oxígeno medicinal.
El modelo, impulsado por el entonces gobernador Carlos Verna y fortalecido durante la gestión de Sergio Ziliotto, garantiza soberanía sanitaria y asegura que cada centro de salud del subsector público provincial reciba el insumo de forma segura, equitativa y permanente. El oxígeno medicinal es un gas puro para inhalación que se administra para aumentar los niveles de oxígeno en sangre y tejidos. Su producción local se realiza a partir de aire ambiente que, mediante filtrados y compresiones, alcanza una concentración superior al 94 % de pureza.
“Se trata de 18 años de un gran avance técnico, un ejemplo de soberanía sanitaria y de una política pública sostenida en el tiempo”, dijo el subsecretario de Salud, Gustavo Vera, ante la Agencia Provincial de Noticias.
Actualmente, La Pampa cuenta con tres sedes destinadas a la producción de oxígeno medicinal: General Acha -en funcionamiento desde 2007-, General Pico y Santa Rosa, todas ubicadas en predios de hospitales de cabecera.
Vera precisó que la Red Provincial de Salud dispone de 10 plantas productoras distribuidas entre las tres sedes estratégicas. Allí se produce, almacena y distribuye este medicamento vital hacia todos los establecimientos asistenciales del subsector público. “Este esquema garantiza cobertura integral en todo el territorio y, al mismo tiempo, brinda apoyo técnico y asesoramiento a instituciones privadas”, señaló.
La importancia de la soberanía
El funcionario recordó que, a comienzos de los años 2000, la Provincia afrontaba costos millonarios por la compra de oxígeno a empresas multinacionales, con valores superiores a siete dólares por metro cúbico. “Esa dependencia externa ponía en riesgo la estabilidad del sistema de salud. Por eso el Gobierno provincial tomó la decisión estratégica de instalar plantas propias”, explicó.
La gestión de las plantas comenzó durante el gobierno de Carlos Verna, continuó con Mario Jorge y se consolidó bajo la conducción de Sergio Ziliotto. “Esta trayectoria demuestra que estamos ante una política de Estado. La decisión de sostener e incrementar la inversión en salud permitió fortalecer y ampliar la capacidad productiva, algo que fue determinante durante la pandemia de COVID-19”, remarcó Vera.
Recordó que la emergencia sanitaria multiplicó la demanda del insumo, pero la red respondió con solvencia. “Tuvimos cientos de pacientes respirados y no hubo un solo día sin oxígeno medicinal. Eso fue posible por una decisión política que entiende que invertir en salud es garantizar derechos y salvar vidas”, afirmó.
Departamento de Oxígeno: gestión profesionalizada
El jefe del Departamento de Oxígeno Medicinal, Horacio Laborde, explicó que la creación del área permitió profesionalizar la gestión en todas sus etapas: producción, almacenamiento, distribución y control de calidad. Indicó que un equipo especializado de 18 trabajadoras y trabajadores garantiza el abastecimiento en todo el territorio provincial.
El Departamento funciona los 365 días del año y asegura la autosuficiencia provincial. Laborde subrayó el valor del recurso humano: “Las decisiones políticas son fundamentales, pero sin un grupo comprometido que pone el cuerpo todos los días, sería imposible sostener este sistema”.
En ese marco, destacó la incorporación de nuevos perfiles técnicos y administrativos, entre ellos Rocío Gardón, primera mujer en integrar el equipo. “Su aporte técnico y su mirada renovadora consolidaron la profesionalización del Departamento”, resaltó.
Acceso equitativo, seguridad y eficiencia
Gardón, ingeniera en Recursos Naturales y supervisora de la planta de oxígeno y redes medicinales, explicó que las redes centralizadas permiten abastecer de oxígeno y otros gases a través de cañerías, evitando el uso de cilindros individuales. “El sistema mejora la seguridad, optimiza recursos y garantiza un acceso equitativo para todos los pacientes”, indicó.
“Trabajamos para que cada establecimiento del subsector público cuente con oxígeno medicinal centralizado. Detrás de la soberanía sanitaria hay una decisión política, pero también la certeza de que cada paciente merece una prestación segura y de calidad”, agregó.
Taller móvil: innovación y soberanía sanitaria
La profesional detalló que el taller móvil, creado inicialmente para tareas de mantenimiento, se transformó en una herramienta estratégica para instalar y ampliar redes de oxígeno en hospitales y centros de salud. Durante la pandemia fue clave para acelerar procesos y garantizar respuestas en tiempo récord, en un contexto global de escasez.
“Integro un equipo -dijo- que demuestra que La Pampa concibe la salud pública como una verdadera política de Estado. Cuando la salud es política de Estado, se garantizan derechos, se salvan vidas y se construye un camino de independencia y autosuficiencia que trasciende fronteras”.