La artista y militante por los derechos humanos Raquel Pumilla falleció en las últimas horas en Santa Rosa, luego de permanecer cuatro días internada con un delicado estado de salud. Su muerte estaría vinculada a un caso sospechoso de botulismo, sobre el cual se había emitido una alerta sanitaria reciente desde el Ministerio de Salud de La Pampa.
Las muestras correspondientes fueron enviadas al Instituto Malbrán, con el fin de determinar si se trata o no de botulismo. La noticia generó una profunda conmoción en el ámbito cultural y social de la provincia.
Pumilla era esposa del escritor Pinky Pumilla y una figura de fuerte compromiso con las causas vinculadas a los derechos humanos, además de una referente indiscutida del arte pampeano.
Raquel Pumilla fue pintora, ceramista, diseñadora, ilustradora y grabadora. Egresó del Instituto Provincial de Bellas Artes y desarrolló una extensa trayectoria que la posicionó como una de las artistas más reconocidas de La Pampa.
En 1973 obtuvo el Primer Premio del Concurso de Murales de la municipalidad de Toay, obra realizada junto al artista plástico Alberto Aguerrido. Nueve años más tarde recibió el Segundo Premio en el Concurso de Murales organizado por la municipalidad de Santa Rosa y una Mención especial en el Salón Pampeano por la obra Naturaleza Muerta. En 1984 compartió una muestra con Marta Arangoa.
A lo largo de su carrera publicó numerosas ilustraciones en revistas, libros y diarios, acompañando trabajos de escritores de relevancia. Su obra integra museos provinciales y colecciones privadas del país y de distintos puntos de Latinoamérica.
Además, fue jurado del Salón Nacional de Dibujo y Grabado, realizado en la ciudad de Buenos Aires, y recibió múltiples premios y distinciones. En 1998 expuso su producción en el Encuentro Latinoamericano de artistas gráficos, desarrollado en La Pampa, donde fue seleccionada tanto en el concurso como en la muestra Literatura de Cordel.