Continúa desarrollándose en Cipolletti, Río Negro, el juicio por jurados por el femicidio de la joven pampeana Agustina Fernández. Un testigo, amigo de la víctima, reveló que ella le había dicho que el acusado, Pablo Parra, se había puesto “intenso” y que “flasheaba matrimonio”. En tanto, una exnovia del presunto autor del crimen aseguró que cuando cortó la relación con él vivió momentos de tensión y violentos.
En una nueva jornada del juicio por jurados que se desarrolla desde el pasado lunes en Cipolletti, declaró un amigo de Agustina, quien dijo que la víctima le reveló que había estado con el acusado, Pablo Parra, pero que se había puesto “intenso”, que había “flasheado matrimonio” y se había “enganchado demás”.
En tanto, una exnovia de Parra también aportó datos sobre la personalidad del presunto autor del crimen. Su declaración fue sin la presencia del imputado en la sala de audiencias.
La testigo contó que fue novia de Parra en el colegio secundario. Tuvieron una relación de un año y medio. Dijo que cuando ella decidió cortar, hubo momentos de tensión porque Parra, que entonces era un adolescente, le usó su correo electrónico y descubrió que hablaba con otra persona por chat y se enojó.
Recordó que una vez ella fue a un ciber a chatear con esa persona, pero Parra se creó un perfil falso similar al del otro chico. Cuando salió del ciber se lo encontró y le pedía explicaciones. Según la testigo, Parra la siguió en la moto y le insistía. Le tiraba la moto encima.
Contó otro episodio. Dijo que en ese momento estaba asustada y describió como bastante violento todo lo que pasó. Pero también afirmó que después de un tiempo a Parra se lo cruzaba en la calle y no pasó más nada.
Los fiscales Santiago Márquez Gauna y Martín Pezzetta sostienen que Parra fue el autor del ataque contra Agustina la noche del 2 de julio del 2022. Afirmaron en su alegato de presentación que el acusado planificó una cortada para desviar la investigación y simuló que la joven había sido víctima de un robo.
Los abogados por la querella, en representación de los padres de la víctima, adhirieron a esa teoría. Acusadores público y privado destacaron que se trató de un femicidio y advirtieron que el acusado estaba obsesionado con la joven, que lo rechazó. Por eso, resolvió matarla. La estudiante murió tres días después del ataque, en el hospital de Cipolletti.
El defensor particular Juan Coto planteó en el alegato de presentación que justamente si el objetivo de Parra era asesinarla, ¿por qué la dejó con vida?. Y advirtió que los rastros de ADN que los peritos hallaron en las uñas de Agustina se cotejaron con el perfil genético del acusado y no es compatible.
