Un total de 13 personas murieron en el ataque que se produjo en la noche del miércoles contra un bar en la localidad californiana de Thousand Oaks, cuando un hombre entró y disparó contra los asistentes, informó hoy la oficina del sheriff de Ventura County. El atacante está entre los muertos.
«No hay indicios de terrorismo, pero investigaremos esa posibilidad. Creemos que fue planeado y no espontáneo», declaró el sheriff Geoff Dean. Por ahora, el tirador no ha sido identificado y se cree que actuó sin otros cómplices.
Inicialmente, el Departamento de Bomberos del condado de Ventura había explicado que en el tiroteo en el bar Borderline se produjeron «múltiples heridos».
Un testigo dijo a la filial local de la cadena ABC que vio a un sospechoso, con barba y sombrero, lanzar granadas de humo y atacar a un vigilante de seguridad, antes de comenzar a disparar indiscriminadamente.
Un portavoz policial del condado aseguró que se cree que en el momento del ataque había unas 100 personas. En el local, el más grande de música en vivo de la zona, se celebraba anoche una fiesta de música «country» para universitarios.
Thousand Oaks está unos 60 kilómetros al noroeste del centro de Los Ángeles y no muy lejos de las áreas de Calabasas y Malibú.