Debido a filtraciones y riesgos de electrificación de las paredes de sus viviendas, tres familias se autoevacuaron en la noche del martes luego de la fuerte tormenta que se desató en Santa Rosa y que descargó gran cantidad en poco tiempo.
El director de Gestión Social del municipio, Sandro Martín, reveló que los problemas se dieron en Río Negro al 1300, Caseros y Maipú y Suipacha al 900, al norte de Santa Rosa.
“Se autoevacuaron porque son viviendas precarias, tenían filtraciones en los techos y había riesgos de electrificación”, dijo Martín a Diario Textual.
También hubo inconvenientes en un departamento del Barrio Butaló, donde a una familia se le cayó el cielorraso.
En tanto, un bowling de la calle Lagos debió cerrar ante el riesgo que corría por el agua que entraba producto de oleaje que provocaban los vehículos.