Luciano di Nápoli, flamante intendente de Santa Rosa, desarrolló al mediodía su primera actividad oficial: recorrió tres comedores de la municipalidad. Posteriormente, en diálogo con la prensa, dijo que los trabajadores estatales le comentaron que «cada vez es mayor la cantidad de gente que concurre a los comedores» a raíz de la crisis social y económica y expresó que ya firmó el proyecto de ordenanza que elevará al concejo deliberante para que se declare la emergencia social en Santa Rosa. «Nos permitirá ahorrar pasos administrativos para atacar el hambre», dijo.
«Vengo de recorre el comedor de Villa Santillán, el de Matadero y el de Zona Norte. En el aspecto edilicio tenemos problemas, pero el mal mayor, como lo marqué ayer en el discurso en el concejo, es que hay una crisis social. Los trabajadores nos marcan que cada vez viene más gente, con más de 11 mil personas viviendo en la indigencia en Santa Rosa. Eso hace que cada vez más niños y personas mayores vengan a comer o a retirar una vianda«, dijo.
El jefe comunal dijo que este jueves, en el concejo, le darán ingreso a varias iniciativas: la declaración de la emergencia social; la prórroga de la emergencia sanitaria; y la prórroga de la emergencia del transporte. También espera la aprobación del organigrama nuevo que, hasta el momento, ha impedido asumir a algunos funcionarios. Entre ellos, a la secretaria de Desarrollo Económico, Carmina Besga.
Di Nápoli ya redactó la declaración de emergencia social y la envía al concejo
Esas iniciativas deberán ser tratadas en sesiones extraordinarias. «Esperamos que tengamos ya declarada la emergencia social el próximo lunes o martes, con el fin de gestionar más rápido algunas partidas (presupuestarias) que son necesarias para refuerzo alimentarios, poder mejorar la dieta nutricional y comprar equipamiento», dijo.
Por otro lado, le respondió a Leandro Altolaguirre, quien dijo que quedó un plazo fijo de unos 130 millones de pesos -2 millones de dólares-, que servirían para pagar salarios y aguinaldo. «En realidad, sirven para pagar salarios. No alcanza para aguinaldo y bono», respondió. Igual aún quedan unos días para seguir recaudando.
«El diagnóstico lo dio la ciudadanía el 19 de mayo, no es que lo hice yo únicamente», dijo. «Todos los que vivimos en esta ciudad, la mayoría, tomaron otro camino y decidireron que no era el correcto el que estaba llevando adelante Altolaguirre. Con respecto al número (del plazo fijo) que él manifiesta, todavía no pude hablar con el secretario de Hacienda (Pablo Echeveste), lo puse en funciones hace dos horas, para confirmarlo», expresó.
Además, el intendente confirmó que se cayó el convenio que habían firmado Altolaguirre y el gremio Sipos por los trabajadores de la Dirección de Agua y Saneamiento, a partir de que lo objetó un dictamen de la Asesoría Letrada de la Provincia y de que el subsecretario de Trabajo, Marcelo Pedehontaá, lo dejó sin efecto. “Me comprometí y lo dije siempre. Es un tema que vamos a tratar analizandolo bien. Voy a recibir a todos los gremios, no solo a Sipos, para tratar el tema de las condiciones laborales de todos los trabajadores municipales y específicamente el tema de Dagsa», dijo.
Altolaguirre y su «herencia»: deja 2 millones de dólares en un plazo fijo