El Gobierno nacional aprobó una suba del 9% en las tarifas eléctricas, en los que será el primer aumento de los dos definidos para este año, con el objetivo de iniciar además la segmentación de los subsidios para que lleguen a los sectores más vulnerables.
Con este incremento se levanta el congelamiento de las tarifas eléctricas que estaba vigente desde diciembre de 2019 con la sanción de la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva.
La última prórroga del congelamiento se definió en diciembre de 2020, en donde además el Poder Ejecutivo habilitó la renegociación de las tarifas de la luz y el gas, que tendrá al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) y al Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) al frente del proceso.
La situación de las tarifas de electricidad estaba sobre el escritorio del propio Alberto Fernández, quien venía manteniendo conversaciones con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero y el ministro de Economía, Martín Guzmán, publicó el diario Ámbito Financiero.
Al mismo tiempo que se decidió el incremento, también se definió pedirle la renuncia al subsecretario de Energía Eléctrica, Federico Basualdo. El ahora exsubsecretario no trazó un esquema para salir del congelamiento de forma ordenada, considerando los costos, los subsidios y el impacto en el bolsillo de los argentinos, informó el medio porteño.
En el análisis de la segmentación tarifarias y la asignación de subsidios, en el Gobierno nacional apuntan desde el inicio de la gestión a evitar los “tarifazos” tal como ocurrieron en la era del expresidente Mauricio Macri.
A partir del entrecruzamiento de datos de los distintos organismos como la AFIP y ANSES, la intención es diagramar un esquema de subsidios que contemple la situación de los sectores más vulnerables, pero que la ayuda llegue de forma directa a quien los necesita. En la Casa Rosada quieren evitar por ejemplo errores del pasado, en donde al definir subsidios por zonas geográficas, se terminaban beneficiando personas de alto poder adquisitivo.