Entre 150 y 200 personas se movilizaron este lunes por las calles de la ciudad de Santa Rosa, en rechazo al DNU del presidente Alberto Fernández que obligó desde el fin de semana al cierre de gimnasios en la capital pampeana, Toay y Pico.
En el Gobierno intentaron bajarle el precio a esa marcha: voceros dijeron a Diario Textual que “la gran mayoría de los manifestantes respondían a un gimnasio” y sostuvieron que el resto de los dueños de estos locales estaba dialogando para recibir una ayuda económica de 45 mil pesos y suspensiones de pagos de impuestos.
Por lo pronto, en la protesta estuvo Eduardo Filgueira Lima, dueño de La Roseta, uno de los gimnasios de la capital. “Nosotros queremos tener abierto, no una ayuda económica. De hecho, hoy la mayoría abrió”, soltó
Dijo que analizan presentar un amparo en la Justicia Federal. “Los gimnasios no son ámbitos de contagio”, sostuvo.
Los gimnasios de Toay, Santa Rosa y General Pico debieron cerrar desde el sábado por decisión del Gobierno nacional.
Fue a partir del DNU 287/21 que firmó el presidente Alberto Fernández. Así, en los departamentos Maracó, Capital y Toay (por integrar estos últimos un mismo aglomerado urbano) se prohibieron las actividades de gimnasios, cines y teatros en lugares cerrados. Es decir, eventualmente pueden tener abiertos esos lugares si realizan las actividades al aire libre.
Por lo pronto, el subsecretario de Deportes de La Pampa, Ceferino Almudévar, se reunió este lunes con propietarios de gimnasios. Les prometió 45 mil pesos por gimnasio y la eximición del pago de los Ingresos Brutos que vencen este mes.
A su vez, el gobernador Sergio Ziliotto dijo este lunes que va a “respetar el DNU” presidencial que dispuso el cierre de cines, teatros y gimnasios para frenar los contagios de covid. “Las medidas están basadas en claras evidencias científicas y epidemiológicas”, dijo.