Un hombre de Río Negro quiso hacer el negocio de su vida pero le salió mal: vendió un automóvil para comprar 800 kilos de costillares y pasarlos al sur del río Colorado, donde los iba a revender al doble, pero fue interceptado antes por la Policía y perdió todo.
El decomiso se hizo en el puesto caminero de Catriló, en la tarde de este miércoles, pudo saber Diario Textual.
Policias del área operativa de Lucha contra el Narcotráfico, con uniformados del puesto de ingreso a La Pampa por la ruta 5, interceptaron a un camión Mercedes Benz que se trasladaba desde la ciudad de Buenos Aires a Río Negro.
Además del conductor, venía un acompañante. La Policía, al controlar la carga, encontró debajo de unas lonas 77 cajas con costillares congelados -en rigor, algunos ya algo descongelados-. También halló 89 bolsas de menudencias bovinas, sumergidas en agua. En total, puesto en Río Negro, el cargamento tendría un precio de alrededor de 1,5 millones de pesos -solo en costillares, un millón-.
Los policías le dieron intervención a la delegación General Pico del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), quienes retiraron todos los productos. Los llevaron a Pico.
Según pudo confirmar Diario Textual, el acompañante del camión era el dueño de la carga: había vendido en Allen (Río Negro) un auto para comprar en Mataderos (Buenos Aires) la carga. Pretendía vender el kilo de costillar en al menos 1000 pesos.
Desde hace décadas, no se permite el paso de asado con hueso al sur del río Colorado. El Senasa argumenta que así se evita la posibilidad de transmisión de la fiebre aftosa a Río Negro, Neuquén y el resto de las provincias del sur.
Esta restricción ha provocado que el asado con hueso se comercialice al doble del precio de La Pampa. También ha incrementado el contrabando.