Tres funcionarios de la Administración Provincial de Energía fueron denunciados en la Fiscalía de Investigaciones Administrativas por el supuesto cobro de horas extras que no realizan. La maniobra, según se dice en la denuncia, se hace “de manera sistemática» desde, como mínimo, agosto de 2020.
La denuncia que ingresó a la FIA reveló que los funcionarios aludidos “valiéndose del ejercicio de un claro abuso de poder y aprovechándose de la profunda amistad que existe entre ellos, se pusieron de acuerdo para autoasignarse a sus haberes salariales, de forma indebida, un monto de dinero en concepto de remuneración por la realización de una cierta cantidad de horas extras mensuales.
El carácter de indebido y reprochable de todo esto es que las horas extras consignadas en las liquidaciones correspondientes son “totalmente falsas e injustificadas” ya que los funcionarios señalados “nunca han realizado labor alguna que justifique el cobro de tales horas extras”, remarcó el denunciante. “Por ende, la acción que vienen desarrollando es lisa y llanamente una defraudación al Estado”, aseveró.
Según la denuncia, la maniobra se habría consumado en medio del “desorden administrativo que generó la pandemia” el año pasado. De esta manera, los funcionarios denunciados “agregaron a sus sueldos horas extras que nunca realizaron y que, ergo, son imposibles de acreditar”.
¿Cómo habrían consumado el cobro indebido de estas horas extras? Según la denuncia, la estrategia que emplearon para poder autorizar sus propias horas extras y evitar el control del fichador es la siguiente: cada uno de esos funcionarios firma una planilla de horas extras donde autorizan las horas del resto del personal que tienen a su cargo en cada gerencia, pero también le incorporan sus propias horas extras (ficticias). Posteriormente, el registro de sus propias horas extras es enviado disimuladamente a contaduría general conjuntamente con la liquidación de sueldos del resto de los empleados y así pasa desapercibida la práctica fraudulenta.