Un matrimonio de jubilados del barrio Fitte, de Santa Rosa, sufrió el robo de 18.500 dólares mediante una estafa telefónica. Los engañaron haciéndoles creer que tenían secuestrado a uno de sus hijos y su familia.
El llamado de los delincuentes se produjo el miércoles a las 7.30. Les dijeron que tres personas habían entrado a la casa de su hijo, le estaban apuntando con un arma y si no les daban la suma de dinero que pedían los iban a matar.
Les pidieron 10.000 dólares para liberarlo y les dieron instrucciones para dejar el dinero en la vereda, sin cortar la comunicación. Dejaron los 10.000 dólares, pero les pidieron más. Y el matrimonio entregó 8.500 dólares más.
Los estafadores les pidieron que no hicieran la denuncia porque iban a volver. Varias horas después las víctimas fueron hasta la casa de su hijo y allí comprobaron que habían sido engañados. Hicieron la denuncia y se activó la investigación.