El diputado nacional Hernán Pérez Araujo (Frente de Todos) reclamó que el laudo por la realización o no de la represa hidroeléctrica Portezuelo del Viento no se concrete y que se cumpla lo que por mayoría decidieron los gobernadores en el Consejo de Gobierno de Coirco. “Pidieron pronto despacho y no había nada que despachar”, sentenció.
Este 21 de enero vencerá el pedido de pronto despacho que hizo el gobernador mendocino Rodolfo Suárez para que el presidente Alberto Fernández defina el laudo y determine si avala o no la realización de la represa hidroeléctrica.
“El estatuto y el reglamento son muy claros al respecto: fijan un plazo perentorio de 60 días, prorrogables por 30 días más, para instar el procedimiento de resolución de conflictos”, planteó Pérez Araujo.
“Mendoza ha llevado a instancias del presidente en la Nación un pedido de pronto despacho, pero parece que no hay nada que despechar”, dijo.
“Todos los plazos se han vencido sin que la provincia de Mendoza haya instado el laudo presidencial o el mecanismo de resolución de conflictos que en el acta N°73 de Consejo de Gobierno de código manifiesta iba a realizar. Por lo tanto, no hay proceso, ni debiera haber laudo, sino remisión a lo decidido por los gobernadores”, agregó en un comunicado.
“Ha habido mucha cháchara de parte de las autoridades y prensa mendocinas, mucho grito y alharaca, pero la verdad es que ha habido poco trabajo, y jamás pusieron en práctica todo lo que por los medios nos fueron anunciando”, publicó.
“Ahora van a buscar culpables, por supuesto. En la Nación, en La Pampa y vaya a saber dónde más. Lo único claro es que nos ponemos a trabajar en el Estudio y posterior Evaluación Ambiental de toda la cuenca, o deberán usar el dinero (la friolera de 1.023 millones de dólares) en otras obras que, vale recordarles, deberán ser analizadas y aprobadas dentro de los respectivos organismos de Cuenca de manera previa a su concreción”, completó.
La licitación de Portezuelo del Viento avanzó a tal punto que está lista para ser adjudicada al consorcio Malal-Hue, la unión transitoria de empresas (UTE) encabezada por la china Sinohydro Corporation junto a las firmas locales IMPSA, CEOSA y Obras Andinas. Pero tras el rechazo de La Pampa, el Gobierno nacional puso en duda la autorización para realizar la obra.
Portezuelo es una obra que resiste La Pampa: podría afectar la calidad y cantidad de agua del río Colorado. Es decir, entre otros puntos, podría afectar la provisión de agua potable a casi todos los pampeanos.
El temor es que la megaobra provoque la extinción del Colorado, que actualmente abastece para consumo y riego en Neuquén, La Pampa, Río Negro y Buenos Aires. Por tal motivo, el Gobierno provincial pretende que se haga un estudio de impacto ambiental regional para establecer cómo impactará su construcción.