El ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, anticipó que, en el marco de las manifestaciones y la represión, no enviará fuerzas de Gendarmería nacional a Jujuy. “La represión nunca es buena”, dijo, pero, al mismo tiempo, comunicó que no enviará fuerzas federales.
“Las fuerzas federales no pueden intervenir en una provincia sin la autorización previa ni el armado de un Consejo. Yo no tengo una orden”, dijo Fernández en la puerta de Ministerio de Seguridad de la Nación. “La Policía de Jujuy es la que está actuando, nosotros no tenemos nada que hacer ahí”, dijo. “Nosotros miramos con mucho detenimiento y preocupación porque la represión nunca es buena”.
La firme postura del ministro Fernández se conoce un día después de que la Justicia Federal habilitara a Gendarmería a garantizar la libre circulación por las rutas nacionales ocupadas por varios grupos de comunidades originarias y piqueteros que cortaron los accesos para protestar contra la reforma constitucional provincial, impulsada por el gobernador Gerardo Morales.
“Autorizase a la Gendarmería Nacional y Policía de la provincia de Jujuy se tomen los recaudos pertinentes, siempre y cuando las circunstancias de hecho lo permitan”, expresó el juez tras haber recibido una solicitud en carácter urgente, por parte del fiscal federal de turno, Carlos Colonnese. El escrito judicial indica que esta medida se llevará a cabo “para asegurar la libre circulación”.
También respondió a las acusaciones de Morales, quien ayer apuntó como responsables de la violencia en Jujuy al presidente Alberto Fernández, a la vicepresidenta Cristina Kirchner y a él mismo. “Lo que dice el Gobernador es mentira”, expresó. “¿Ustedes pueden creer esa estupidez? Díganme una persona que haya actuado impulsada, financiada, incitada, acompañada para ir a provocar un problema a Jujuy. ¡Que presenten las pruebas! Hasta ahora estamos hablando de algo que no tiene”, planteó el funcionario ante las reiteradas preguntas de los periodistas.