Finalmente, la oposición no consiguió el quórum necesario en la Cámara de Diputados para la sesión especial pedida por el interbloque de Hacemos Coalición Federal de Miguel Angel Pichetto, que tenía el objetivo de tratar un proyecto de la Coalición Cívica para modificar la fórmula de movilidad jubilatoria y atarla a la inflación.
La convocatoria, que contó con el apoyo de Unión por la Patria, el Frente de Izquierda, partidos provinciales y un sector de la UCR, no alcanzó los números necesarios para dar inicio a la sesión: solo se sentaron en sus bancas 119 diputados, mientras que hubo 138 legisladores que decidieron no bajar al recinto.
El elemento decisivo para que se frustrara la convocatoria al recinto fue la decisión del bloque de la UCR, que mayoritariamente decidió vaciar el recinto. Apenas cinco diputados díscolos encabezados por Facundo Manes se sentaron en los escaños. Entre ellos, la radical pampeana Marcela Coli.
En tanto, también dieron quórum los peronistas Ariel Rauschenberger y Varinia Marín. A su vez, no se sentaron en sus lugares Martín Ardohain y Martín Maquieyra, del PRO.
Pasadas las 12.30 solo había 119 diputados presentes. El grueso lo aportó el bloque Unión por la Patria, con 96 diputados en el recinto. Sin embargo, la sorpresa fue que Hacemos Coalición Federal, que había pedido la sesión, no contó con todos sus miembros. Fue por influencia del gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, que bajó a tres de los legisladores que le responden políticamente: Carlos Gutierrez, Alejandra Torres, Ignacio García Aresca. Este último había sido uno de los firmantes del pedido de sesión especial. Natalia de la Sota y Juan Brugge sí estuvieron presente.
En la misma línea, el mandatario de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, influyó sobre Francisco Morchio. La diputada Margarita Stolbizer tampoco estuvo en el recinto por estar de viaje.
Los gobernadores de Misiones, Salta y Río Negro también tuvieron un gesto de buena voluntad con Javier Milei ya que ninguno de los ocho diputados de Innovación Federal bajó a dar quórum.
Por su parte, el radicalismo dejó expuestas una vez más sus diferencias internas. Los diputados Facundo Manes, Marcela Coli, Fernando Carbajal, Pedro Galimberti, Pablo Juliano decidieron bajar a dar un quórum “testimonial” para dejar en claro que no están de acuerdo con la postura “colaboracionista” de la jefatura del bloque (Rodrigo de Loredo).
Ayer el oficialismo anunció que conformaría la comisión de Previsión Social y convocó a su primera reunión para hoy a las 16. La maniobra buscaba desactivar la sesión y fue clave para que el radicalismo mayoritariamente se abstuviera de participar. También fue el argumento que usaron el PRO y los libertarios para justificar su ausencia.
El peronismo, en tanto, no tenía verdadero interés de avanzar específicamente con la fórmula que impulsa la Coalición Cívica (HCF) sino para “comenzar a construir una agenda parlamentaria”. Cabe destacar que la fórmula actual fue implementada durante el gobierno de Alberto Fernández.
En ese sentido, proponían ampliar los temas en discusión y también emplazar a las comisiones a discutir los proyectos sobre el Fondo de Incentivo Docente (FONID), el Fondo Compensador del Transporte y otros temas vinculados a las arcas provinciales.